50 ANIVERSARIO DE LA REVOLUCIÓN CUBANA: "Hay que apretarse más el cinturón"

Cincuenta años de revolución cubana : 1ª parte

Cincuenta años de revolución cubana: 2ª parte

Tras la reciente celebración del 50 Aniversario de la Revolución Cubana, hasta los éxitos más emblemáticos de la misma, tales como la educación y la sanidad, aparecen ensombrecidos por la carencia de medios y la frustración política, social y económica actuales ante las nulas expectativas de un mañana mejor. Raúl Castro vaticinó un futuro todavía más negro, si cabe. “quizá en adelante todo sea más difícil”, y advierte que “este país puede autodestruirse” si intenta cambiar los fundamentos revolucionarios

En Cuba la historia parece haberse detenido. El inmovilismo actual, por no decir retroceso, es el culpable del estancamiento y del deterioro social en que se encuentra este país. Entre las causas del inmovilismo, que son muchas, cuatro están siendo determinantes. En el orden interno, la edad casi octogenaria de los altos dirigentes, la limitación de los derechos humanos y la ausencia de espacios, instrumentos e instituciones cívicas independientes y democráticas; y en el orden externo, el conflicto entre los gobiernos de Cuba y de Estados Unidos.

De cara al año, recién estrenado, los que nos sentimos solidarios con este país sólo podemos hacer votos porque, ya de una vez, se produzca la transición desde el propio país a partir de una diálogo entre la oposición y el poder establecido y que tanto el exilio cubano como el nuevo gobierno de los EEUU puedan aportar actitudes comprensivas y colaboradoras que faciliten ese pacto interno. Nadie añora la dictadura de Batista y, en su día y durante muchos años, bastantes fuimos partidarios de la revolución castrista. Hoy, sobre todo, pero desde hace más de una década, los que la alentamos, hemos perdido toda la confianza en que esta frustrada revolución pueda resurgir de sus propias cenizas sin voluntad propia de cambio y la colaboración constructiva del conjunto del pueblo cubano.

A continuación cito la entrada sobre una cuestión educativa que publica la conocida periodista Yoani Sánchez en su bitácora “Generación Y” desde el corazón de La Habana.

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ABUSADOS (3-I-2009))

“Estamos atentos a que nadie se acerque lascivamente a nuestros hijos, pero pocos se dan cuenta cuando el manoseo se centra en las mentes y no en los cuerpos. La ideologización de la educación cubana ha llegado a un punto que alarma incluso a quienes nos formamos bajo esos mismos métodos. Con sólo tomar un libro de texto o revisar el sistema evaluativo, puede notarse el terreno que ha ganado la doctrina en detrimento de los conocimientos. En el aula de mi hijo, seis fotos del Líder Verdeolivo adornan las paredes, mientras en las calificaciones se incluye la participación en actividades políticas y patrióticas.

Evoco mi etapa de pionerita leyendo un comunicado o gritando consignas y no puedo dejar de sentirme abusada. Pero la sensación es más fuerte cuando veo que Teo –a sus trece años– ha aprendido ya cuáles opiniones no debe decir en la escuela para evitarse problemas. Descubrir mi propia máscara prolongada ahora en el rostro de mi hijo es más doloroso que aquel estupro del que fui blanco.”