Supongo que todos los países tienen alguna que otra peculiaridad. Japón destaca por distinguirse de los demás por la característica denominada HIKIKOMORI.
Se trata de un patrón de comportamiento social retraído y evitativo que se observa principalmente en jóvenes y adolescentes.
Eligen aislarse del mundo exterior y se encierran en sus casas a menudo por períodos largos y evitan todo el contacto social desvinculándose de la realidad.
El término HIKIKOMORI se compone de las palabras HIKI (retroceder) y KOMORU (entrar) y describe la tendencia a retirarse a un espacio seguro y protegido, como las propias habitaciones, donde pueden pasar el tiempo en soledad y eludir cualquier tipo de interacción. Los HIKIKOMORIS a menudo encuentran consuelo y evasión en actividades solitarias, como navegar en Internet, las redes sociales, los videojuegos o la inmersión en sus propios intereses personales.
Personalmente, ahora que soy mayor, siento algún síntoma de estos, pero cuando era joven me gustaban, sobre todo, las actividades sociales, colectivas y "marchosas"...
Aaah, este
ResponderEliminarsíndrome
existe en
España,
hace tiempo
que los
chiquillos
no juegan
en la calle,
ahora todo
es el móvil,
en un sitio
apartado .
Únicamente en los pueblos se sigue jugando algo en las plazas, calles, etc. Lo observo cuando voy de vacaciones durante el mes de agosto.
EliminarSíntomas del síndrome de Hikikomori
ResponderEliminarLos síntomas que experimentan los pacientes con el síndrome de Hikikomori suelen manifestarse de forma gradual y, a medida que el problema avanza, se agravan o se manifiestan de forma más clara. Estos síntomas pueden ser los siguientes:
Aislarse o confinarse de forma voluntaria.
Encerrarse en un cuarto o habitación concreta de la casa.
Evitar cualquier acto que implique relacionarse en persona.
Dormir por el día.
Descuidar la salud y la higiene personal.
Utilizar medios digitales como sustituto de la vida social.
Tener dificultad para expresarse verbalmente.
Experimentar conductas violentas o desproporcionadas cuando se les cuestiona.
Gracias por tus aportaciones, Anónimo
Eliminarjaja son los frikis de aquí, gente súper experta en ordenadores, videojuegos, muy peculiares e individualistas, al no gustarles demasiado la sociabilidad su mundo se desarrolla en soledad casi siempre, los bloggueros tenemos nuestro punto friki en este sentido, en mi caso lo neutralizo porque soy muy sociable aquí y fuera de aquí, me gusta la gente de todas formas en lata y al natural : ) Un beso LUIS ANTONIO! y gracias por culturizarnos, estos términos los desconocía.
ResponderEliminarMuy de acuerdo con lo que expones., María. Escribir, leer, etc. no está reñido con charlas cuando se tercie.
EliminarBesos, estimada María
síndrome de hikikomori o de aislamiento social ha sido siempre un fenómeno vinculado a otras sociedades. Personas afectadas por una patología mental que deciden recluirse en sus habitaciones para evitar cualquier compromiso social como la educación, el empleo o las amistades durante prologados periodos de tiempo. Aunque es un síndrome que se describió por primera vez en Japón, y que inicialmente se creía que estaba vinculado únicamente a la cultura japonesa, hay casos de hikikomori reportados en otros países como el nuestro, pero también en Omán, Italia, India, Estados Unidos y Corea.
ResponderEliminarLa creación en el Hospital del Mar de Barcelona de un servicio de atención domiciliaria para personas con trastornos mentales graves, ha permitido a los profesionales de psiquiatría y salud mental del centro barcelonés sacar a la luz la dimensión que adopta este síndrome entre nuestra sociedad. Se calcula que sólo en la capital catalana existen a día de hoy unas 190 personas que sufren esta patología mental. La documentación, análisis y estudio de estos casos ha permitido al grupo de profesionales analizar los perfiles de todos los pacientes y extraer los denominadores comunes y la posibles causas de esta enfermedad.
MARTÍ PAOLA
Muchísimas gracias por la interesante aportación que haces
EliminarSaludos cordiales, Martí Paola
Yo creo que este aislamiento puede provocar un incremento de la adiposidad, una pérdida de visión, una alteración de la tersura de la piel, un debilitamiento de las extremidades, una flacidez de las protuberancias naturales, una pérdida de reflejos motores, una inapetencia vital, una disminución sensorial progresiva, una alteración de la microbiótica, etc. en resumen volverse mentalmente acartonado y físicamente torpe.
ResponderEliminarSalud.
Caramba, Francesc, ¡ ni que fueras un catedrático de la materia !
EliminarSaludos cordiales
http://teruelandia.blogspot.com/2024/04/convento-de-las-clarisas-de-teruel-en.html
ResponderEliminarSe trata de mi segundo blog que más bien tiene poca audiencia.
EliminarCada vez me siento más contento de haber pertenecido a un tiempo de extroversión, sobre todo en la juventud, aunque en alguna de sus facetas no se nos permitiera expresarnos como correspondería en una sociedad civilizada. Lo que nos pasa o puede suceder de mayores es otra historia. Aparte de cansancios parciales -soportar a gente, dificultad para dialogar, no aguantar tonterías, etc.- a algunos nos gusta disponer de un tiempo individual y solitario que en absoluto es de cerrazón, pues los libros y un internet bien utilizado nos mantienen muy vivos con el mundo.
ResponderEliminarNo puedo estar más de acuerdo con lo que expresas, Fackel
EliminarPero mucha culpa la tenemos nosotros de que esta generación se haya vuelto tan automática.
ResponderEliminarUn mercado que está todos los días vendiendo productos que no dejan de ser para el mísmo uso...
Lo manual es trabajoso y sobre todo mientras haya una mentalidad de que las manualidades o jugar o simplemente tomarte un café para charlar un rato sea cosa de gente de poco nivel .Ahí hemos dado con una piedra.
Yo tengo una gran amistad con unos compañeros de estudios japoneses que los fines de semana hace origami para aulas de niños con problemas(lo que aquí llamamos aulas enclave).
Mi blog recibe visitas a porrillo y en cambio pocos hombres dejan comentario:porqué aún existe esa idea de que lo tecnológico, lo de masas es el canon a seguir.
Los profesores no pintamos nada y no se dan cuenta que para que siga el mundo evolucionando los primeros pasos tienen que ser por las diciplinas de aprender...
Y sino fíjate en ese dicho :dónde vas Vicente , donde va la gente y en este caso en otras areas.
-Como tú entrada anterior acerca de los nórdicos uff se han sabido
vender pero que muy bien ...
Un abrazo y perdona siempre mis opiniones que son hechas desde las vivencias...
Estimada Bertha., no hay nada que perdonar, si acaso agradecer. Se nota que eres una docente profesional y entregada.
EliminarUn abrazo
...mis alumnos al principio dejaban el móvil en una cesta refunfuñando pero ahora ni eso .Que es eso :que ellos tengan los derechos y nosotros no.Estoy hablando de bachilleres que ya son torres de altos y en cambio sus cositas dejan mucho que desear por culpa de ser tan permisivos.
ResponderEliminarAmén me voy a crear antipatías pero eso es, así
Feliz finde Luis Antonio:))
Es así, no lo dudes. Lo que manifiestas, te honra.
EliminarNo sólo en Japón ya esto es una lacra mundial y más ellos que los padres trabajan de día a día solamente les procuran bienes materiales y después está la otra parte los que gastan sin ton ni son...
ResponderEliminarJapón no es un ejemplo a seguir tampoco...
Sine embargo, Japón pare ce ir a la suya con personalidad propia, ¿no?
EliminarLuis Antonio otra vez mil perdones hoy estoy yo un poco guerrera...
ResponderEliminarEso te honra, Bertha
EliminarYo me siento ahora más en la cueva, Luis Antonio. Por circunstancias. Pero no es positivo. Para los más jóvenes, que aún no han tenido experiencia de vida apenas, incluso peor. También me alegro de haber pertenecido a la generación que no tenía móvil en edades tempranas. Hemos tenido suerte.
ResponderEliminarHay que regresar al papel. Eso he leído en algún libro esta semana...
Me identifico con lo que expresas y apoyo lo del "papel"
EliminarPues sí...
ResponderEliminarJapón entero está lleno de peculiaridades, son alienígenas infiltrados, estoy seguro
ResponderEliminarSaludos