El Quijote es uno de mis libros favoritos y cualquier pretexto es bueno para hablar de él. Hoy me ha preguntado una compañera: ¿quién y cuándo se debe leer El Quijote? Y le he respondido que quien no está acostumbrado a leer, sea grande o pequeño, no debe comenzar de ninguna manera por El Qujote. El fracaso está casi garantizado. Es una lectura que requiere cierta introducción y motivación especial. Y nadie como los que han tenido la experiencia gratificante de esta lectura para llevar a cabo esa función. Quizás de manera un tanto arbitraria, me atrevería a sugerir temas y etapas según la edad y la experiencia de los lectores:
1.- Nivel elemental:
Tema
sugerente:
Parodia de las novelas de caballerías y aventuras y desventuras de don Quijote y Sancho.
Requiere una mínima documentación sobre las novelas de caballerías y el contexto histórico. La obra permite una lectura fragmentada por capítulos o grupos de capítulos que desarrollan una misma historia. Incluso pueden omitirse las novelas interpoladas si resultan excesivamente tediosas. Martín de Riquer dice que lo que no se puede hacer es empezarlo a leer muy pequeño. (Conozco actualmente tantas versiones actualizadas de gran calidad y primorosamente ilustradas que no tengo la menor duda de que es factible su lectura desde niño, a pesar de lo que dice el maestro Riquer). Estas actualizaciones liman las mayores dificultades. Sugiero:
Para niños de Primaria: Ed. Edebé y actualizada por Rosa Navarro.
Para alumnos de Secundaria o con poco hábito de lectura: Ed. Vicens Vives adaptada por Eduardo Alonso.
2.- Nivel medio: Temas sugerentes:
Parodia de las novelas de caballerías y aventuras y desventuras de don Quijote y Sancho.
Idealismo frente a realismo.
Don Quijote: personaje romántico
Visión de la sociedad: clases sociales.
El tema de la camaradería y de la amistad: don Quijote y Sancho.
Técnicas narrativas.
Estructura de la primera y segunda parte.
Martín de Riquer propone la edad de 17 años como la ideal para iniciar su lectura. Considera que hay que tener una cierta formación, haber leído unos cuantos libros, tener una cultura media. Yo hablaría más de edad mental que de edad cronológica. En cualquier caso, la lectura de esta obra requiere una documentación amplia sobre la época: Renacimiento-Barroco, el autor y las novelas de caballerías. La opción mejor y muy económica: Don Quijote de la Mancha.- Edición del IV Centenario.- Edición y notas de Francisco Rico
3.- Profundizar en otros
niveles de lectura:
Prólogos, estructura y diferencias de la Primera y Segunda Parte, evolución de los personajes protagonistas, niveles lingüísticos, técnicas narrativas, estructuras sociales, ficción y realidad, incidencia del Quijote de Avellanedae, etc.
Personalmente, insisto, no recomendaría esta novela a una persona que no tiene el hábito de lectura. Creo que le resultaría insufrible. Pero incluso teniéndola, requiere que ésta sea también con algunas obras clásicas de la Edad de Oro.
Por otro lado, y esto es positivo y singular, es un libro que se puede leer de forma fragmentada porque el hilo argumental es muy simple: Sucesión de aventuras y desventuras de don Quijote y Sancho y personajes numerosos que aparecen fugazmente sin continuidad, salvo alguna excepción: bachiller Sansón Carrasco, etc. Muchos recomiendan comenzar con la Segunda Parte partiendo de unos conocimientos someros de la Primera...
Un placer añadido –para muchos, tormento- es el estilo del lenguaje con sus giros, ironías, matices y frecuentes cambios en función de la categoría social de los personajes, el género literario, las innovaciones técnicas, etc.
A título personal puedo
asegurar que si algún libro de cabecera tengo, este es El Quijote.
En él he encontrado, y me consta no ser la excepción, entretenimiento a
raudales, a toda la sociedad del siglo XVII con sus miserias y virtudes humanas
no lejos de las nuestras; a don Quijote y Sancho confraternizando y conversando
de forma entrañable y abierta; humor y conmoción; propuestas de un mundo mejor
–por qué no soñar y luchar por un mundo ideal-; sabiduría para los más y menos
exigentes; una lengua castellana extraordinariamente ingeniosa y rica en
matices... A mucha distancia de aquellos ministros de Instrucción Pública que decretaron
la lectura obligatoria de esta obra en las Escuelas Nacionales, invito a los
que acostumbran a leer sin prejuicios que vale la pena intentarlo. El
Quijote es muy agradecido con los lectores voluntariosos y llenos de
curiosidad.
Qué cambio de tercio con esta magnífica entrada, Luis Antonio.
ResponderEliminarMe consta que muchos de los que te visitamos somos admiradores del Quijote, casualmente hace un rato comenté en otro blog mencionando su figura.
Pienso que el Quijote se presta a la satisfacción y entusiasmo de pequeños y adultos, pues cada público extrae de la obra matices propios de su etapa vital y con ellos se enriquece.
Cierto que los niños no captarán plenamente el simbolismo, la ironía y la idiosincrasia del alma quijotesca (y sanchesca) que anida en cada uno de nosotros, pero acaso accedan a su mensaje desde otra cosmovisión que a os adultos se nos escapa o tenemos desterrda, o simplemente se entretengan de lo lindo con sus aventuras, que a la edad de los niños es lo que importa, tiempo habrá de dilucidar con profundidad el significado del Quijote, con los niños proceden otras sensaciones más vitales, y a buen seguro que el Quijote se las puede proporcionar… el desafío es conjugar las tablets, móviles, netflix y demás gadgets tecnológicos con la lectura del libro, o quizás poner el Quijote en un formato atractivo para los niños, como un libro electrónico y un profesor que sepa estimular su curiosidad (confieso que no me veo leyendo el Quijote en e-book, bueno ni otros libros, por ahora).
Yo tengo varias ediciones, algunas de coleccionismo, por el puro placer de palpar con mis manos la textura de un viejo libro de Don Quijote de la Mancha.
Precisamente es el lenguaje, el estilo cervantino, lo que da enjundia y gracejo al Quijote, sin ese estilo narrativo perdería su quintaesencia, es ese lenguaje el que nos traslada al universo quijotesco, a las áridas y humildes tierras castellanas, a través de esos giros narrativos se revela con mayor potencia el anverso y reverso de lo que somos, de esos espejos que son Don Quijote y Sancho Panza reflejando nuestro ser.
Un abrazo, Luis Antonio.
Tu comentario evidencia el conocimiento, el criterio y la experiencia que tienes con El Quijote. Agradezco tu aportación que, como de costumbre, es enriquecedora.
EliminarUn abrazo, Paco
Quizá, sino se ha leído El Quijote, sería bueno bajarse en PDF la vida de Don Quijote y Sancho, de Unamuno.
ResponderEliminarAbre el apetito.
Un abrazo
Muy buena y pedagógica recomendación, Tot Barcelona
EliminarUn abrazo
Ay, que este tema me apasiona. Soy de los que piensan que cualquiera que tenga la motivación de leer el Quijote puede comenzarlo sin preparación, ya irá buscando su lectura. Ahora bien, en tiempos en los que no se lee a los clásicos, es evidente que necesitamos alguien que nos guíe, que nos introduzca poco a poco para que no se nos atragante. Pero el motor inicial siempre debe estar en uno, porque si no cualquier lectura es un fracaso.
ResponderEliminarYo tengo la experiencia, en mi infancia, de haber leído algún libro con efecto gratificante a pesar de haberlo hecho por obligación. Algunos no leerían nada si no se les "forzara" un poco...
EliminarUna información completa y bien planteada por tu parte. Nada que objetar. ¿A qué edad habría que leerlo? Al ver tu pregunta me he contestado: a esta, a la mía, a la avanzada. Tiene tantas posibilidades de ser leído que se puede elegir a cualquier edad, por supuesto, aunque con los límites que bien señalas. A mí me interesa cada vez más las conclusiones que Cervantes saca de la vida y de los comportamientos e ideas al uso. Las aventuras, con ser ingeniosas, siempre son la excusa para manifestar las maneras de pensar y vivir. Y la mentalidad nuestra ayuda, ignoro si gentes de otras lenguas y culturas pueden percibir el tufo de idiosincrasia que nosotros captamos por inercia de ser hijos de Quijote y Sancho...y demás personajes de la novela de novelas. Por supuesto, nada fácil para los que lean poco, ni para los que leen apresuradamente.
ResponderEliminarPor el Quijote y la filosofía y psicología de la vida que nos brinda.
No tengo la menor duda de que la relectura de esta obra te conduce a nuevos descubrimientos. De ahí, entre otras razones, su grandeza y universalidad.
EliminarLuís Antonio buenas recomendaciones de una enamorado de la obra.
ResponderEliminarLeer El quijote sin tino arruina la lectura. Y no me importa confesar que completo aún no lo he leído. Así que cuando me lo ponga en mano otra vez seguiré los consejos que me sean pertinetes.
Un saludo con agradecimiento.
Anna Babra
Nunca es tarde para leer un buen libro. Espero que acabe gustándote.
EliminarUn abrazo, Anna
-Depende: hay versiones adaptadas : mis hermanos los dos mayores, se lo leyeron en cómic a los 8 años, mi padre los inició.Y, uno de ellos, quien le corrigió parte de su de tesina: fue casualmente Martín de Riquer y después su hija Isabel.
ResponderEliminar-Yo lo comencé a leer en Bachillerato y la verdad que lo he disfrutado. Estoy totalmente de acuerdo: que hay que leerlo y sobre todo re-leerlo porque cada vez sacas más jugo.Es una lectura; tierna, con humor, sentido del deber,romántica y sobre todo el gran respeto hacia la mujer...
Un abrazo , me ha encantado volver a remover esas memoria...
Me encanta tu comentario y que compartamos ideas, Bertha
EliminarUn abrazo
Digamos la verdad, yo leí el Quijote en Historias Selección de Bruguera con su combinación de comic y texto reducido, luego la leí completa.
ResponderEliminarEl espantoso error de la enseñanza de la literatura en la Secundaria es no comprender que se debe comenzar como se hace todo: de abajo a arriba, de lo fácil a lo difícil, de lo sencillo a los complejo, y no la aberración de coger a unos críos actuales y hacerles leer El Libro del Buen Amor, La Celestina o El Quijote.
Lo que ocurre es que hay que venerar a las viejas glorias y no que los chavales cojan el gusto por la lectura y la literatura.
¿Tan malo sería que se aficionaran a Stevenson, Julio Verne, Salgari o Roald Dahl y luego meterlos en la literatura de altos vuelos incluso vía comic o vía versiones reducidas?
Creo que lo que se hace es una barbaridad y en parte justifica el odio a la literatura de los jóvenes y niños.
Un abrazo
Te felicito por los conocimientos que pones de manifiesto sobre la pedagogía de la lectura.
EliminarUn abrazo
Vivía de alquiler y me había comprado un pequeño apartamento, como no tenia dinero, empecé a leer los fines de semana, que era afición barata que me podía costear: después de leer varios libros, decidí empezar El Quijote. El comienzo fue duro, no lo niego, pero luego me gusto mucho. Lo he leído tres veces y lo hare otra vez por lo menos, aunque supongo que no he sabido sacarle todo el provecho, me gusta.
ResponderEliminarUn saludo
Te felicito por tu perseverancia. Seguro que seguirás descubriendo novedades.
EliminarUn cordial saludo