Lo que está pasando en
Cataluña no es exclusivo de esta comunidad. Todos, desde sicilianos hasta escoceses, parecen
querer más autonomía o independencia. Los británicos votaron para
abandonar la Unión Europea y la hostilidad hacia esa decisión está aumentando
en todo el continente. El crecimiento del nacionalismo y el tribalismo es
evidente no sólo entre las minorías, sino también, de forma incluso más
amenazadora, entre los grupos mayoritarios. ¿Es la moda o algo más
serio? Lo cierto es que no pocos, además de preocupados, ya comenzamos a estar más que aburridos, hastiados, del
monotema del independentismo.
No es de extrañar que personajes tan singulares
como Rafael Sánchez Ferlosio exclame:
"Cataluña me aburre mucho. Es más aburrido que un partido con empate a
cero... Es un coñazo". Ya
tiene más de 90 años y a esta edad no se andan con rodeos y dicen lo que
piensan. Esto es lo que ha hecho este gran escritor a preguntas de un
periodista.
Es posible que no pocos piensen igual que él,
pero no se atrevan a decirlo porque todavía no han llegado a nonagenarios.
Debatir sobre temas de candente actualidad es apasionante.
Confrontar ideas y dejarlas ir es imprescindible y enriquecedor. Al menos para el que escribe. Pero, cuando se
llega al empacho, desintoxicarse de todo ello también es necesario, además de
saludable. En
tales confrontaciones dialécticas lo que sí hacemos con mucha competencia es
quitarle la razón al adversario. Otra cosa es esgrimir la propia. Haría falta,
sobre todo, poner todas las capacidades y el empeño en solventar los problemas
que nos afectan. Ahí sí que deberíamos estar la inmensa mayoría porque a pesar
de los pesares sigo pensando que las personas tenemos más cosas en común que
diferentes.
A veces uno tiene la sensación de que los partidos políticos implicados y confrontados utilizan el tema Cataluña/España como"cortina de humo" para no entrar de lleno en lo que realmente preocupa a la mayoría de los ciudadanos: mejorar la sanidad, la educación, las prestaciones sociales, atajar la corrupción, disminuir las desigualdades, integrar a los emigrantes...
Coincido mayormente en la opinión que aportas. A Sánchez Ferlosio lo tengo por clarividente desde hace muchos años. Cuando escribía con más frecuencia en El País ponía el dedo en la llaga y con visión amplia y honda de muchos problemas.
ResponderEliminarSolo un matiz a lo de que Cataluña (u otros temas que los mass media repiten con tono monocorde) aburre: si solo fuera cuestión de aburrimiento, si tras ese u otros temas de alto riesgo no asomaran abismos...qué divertido sería el aburrimiento. O acaso es que uno lo ve con más pesimismo y teme que todas las ilusiones supranacionales que había desarrollado a lo largo de su vida se vayan al carajo. Y es que o se avanza o se retrocede, no hay más. Gracias por permitirme esta puntualización pequeña.
Lo que haces, más que un matiz o una puntualizacciøn pequeña, es una gran aportación. Profunda, serena y enriquecedora. Te agradezco que hayas entrado en el corazón del debate dejando lo del aburrimiento de lado. CATALUÑA no aburre porque está por encima de discusiones bizantinas. Lástima que ni unos ni otros sepamos dialogar y abordar los temás que nos preocupan a la inmensa mayoría. Uno de ellos, además de los expuestos en la entrada, es la convivencia que no está en su mejor momento.
EliminarSaludos
Rafael Sánchez Ferlosio , que por cierto es hijo de Rafael Sánchez Mazas , fundador de la Falange Española y " inventor " del grito Arriba España , además tiene mas de 90 años , yo como AUN no tengo tantos años NO coincido con el en este tema del ABURRIMIENTO , todo lo contrario a mi me duele , me preocupa , me indigna , me entristece por muchos motivos que serian largos de explicar aquí , una de las cosas que mas me subleva y no es la única , es que la GESTION desde el comienzo de esta etapa del independentismo , han habido otras anteriormente , lo que han protagonizado las DOS partes , el gobierno anterior de España y los independentistas en general y CIU o como se llame ahora , ESPECIALMENTE , y lo que mas me entristece es la falta de reacción de los ciudadanos de a pie catalanes , a los que siempre he admirado por su seny , o al menos eso es lo que yo pensaba
ResponderEliminarAmbas mitades de catalanes se han manifestado masiva y públicamente. Es cierto que los independentistas dominan la calle y cuelgan en sus domicilios símbolos independentistas, mientras que los demás estamos algo así como agazapados e intimidados.
EliminarLo del "seny" que se atribuye a los catalanes se han transformado en gran medida en actitud emocional. El sentido común de la razón ha quedado relegado y así nos va...
Personalmente pienso que lo que cuentan son los votos. En las elecciones autonómico plebiscitarias del 21 de D. los independentistas sacaron el 47,4 % de los votos. Esos resultados son los que cuentan, al margen de lo que dice la Constitución.
ES muy grande Ferlosio. Y lo de Catulaña, en todo, un sinsentido en medio de una España y una Europa cada vez más mediocre y sin horizontes.
ResponderEliminarUn evidente sinsentido. Lástima que ni España ni la UE ofrezcan un mínimo de ilusión...
EliminarMe aburre, como a Sánchez Ferlosio, el monotema la Cataluña del "procés", sobre todo, tal como lo tratan los medios de comunicación, pero me preocupa más el supremacista de la mayoría de los independentistas, me preocupa la dejación de los políticos ocupados solamente en guardar los trastos de su chiringuito, y si para ello han de mover las masas tras unas pancartas y unos lacitos amarillos, pues las mueven.
ResponderEliminarPor un lado tenemos un supremacismo intolerante atroz y por otro lado la cortina de humo que esconde la corrupción y en medio de todo estos unos ingenuos que creen que vendrá una república iluminada que lo arreglará todo.
Salud
Francesc Cornadó
El supremacismo quita la razón y el sentido al independentismo. Toda forma de nacionalismo lo conlleva...
EliminarTambién me sorprende que tantos se crean eso de la "república iluminada". Parece ser que la vida no tiene sentido si no se cree en panaceas.
Salud, Francesc
Si la población mayoritaria comunicara como tú y estos comentaristas deseo imaginar que dichos problemas se resolverían ... pero la “democracia” tal y comos la entienden las “mayorías” es lo que tiene: “ajo y agua” para todo tipo de minorías, sobre todo las de tipo “idealista, inteligente, comprensivo y de buen carácter”...por decir algo. Seguro que me dejó muchas más en el tintero, pero mis imperfecciones superan a mis aspiraciones. Hace tiempo que mi naturaleza perdió la esperanza en el instinto humano dado el ínfimo espacio temporal en que a este le toca manifestarse, respirar, “cagarla” en resumidas cuentas, etc.
ResponderEliminarUn saludo LUIS Antonio, se agradece este ratito de asueto bloguero, reposando mis maltrechas vértebras. Ahora he de volver a mis agotadoras tareas diarias: ando de mudanza solitaria y no es una más de las muchísimas que he realizado, sino la definitiva, la consecuencia de todas las anteriores. Y no se trata de capricho de vieja sino de la más cansina de mis coherencias, y cómo pesan las condenadas!
No hagas muchos esfuerzos. Las vértebras pueden resentirse...Yo siempre prefiero utilizar el término "penúltima". Nunca se sabe...En todo caso, que la susodicha mudanza sea para bien...
EliminarDebo decir en esta entrada que me siento confuso y ciertamente lo catalán (como lo de cualquier otra autonomía) me importa, si y mucho porque siempre he sido y soy un admirador de ese pueblo emprendedor y abierto, donde tuve mi primer trabajo por cuenta ajena…pero me entristece el no ver la salida a ese encono nacionalista, dado que tras él son o hay grandes intereses en juego y nadie cede o todos quieren llevar el “ascua a su sardina”…lo cual no quiere decir nada; sólo que entiendo yo que con esos mimbres no se puede construir nada. Gracias Luis Antonio, por este portal ilustrativo y con el mejor de los afanes.
ResponderEliminarUn abrazo
Creo que tu diagnóstico es muy certero. Participo de tu suspicacia sobre el porqué de este "encono nacionalista".
EliminarUn abrazo
Algunos, te falta el (creo) determinante, son algunos escoceses, algunos sicilianos y algunos catalanes. Tal vez la crisis económica pasada tenga mucho que ver y algunos tengan que seguir dando pedales para no caerse de la bicicleta y es que buscar trabajo fuera del partido y el enchufismo institucionalizado esta mal, en gran parte por culpa suya...
ResponderEliminarCuando se elige a la gente por su filiación política más que por sus capacidades, se parece mucho a la Rusia de Stalin o a la España de Franco, y aquí lo dejo, que me caliento.
Un saludo
Lo de la filiación política también se da en las democracias. Sólo hay que ver cómo se elaboran las listas electorales...
ResponderEliminarSaludos
Y así pasa lo que pasa, que un tonto pelota puede ser ministro o sub-secretario
EliminarSi lo dice Ferlosio, quizás el mejor ensayista español a sus 90 años poco hay que decir. En realidad el tema catalán es solo un tema no el tema y se ha usado y abusado para no hablar de otros temas y para alimentar el discurso de ambos bandos.
ResponderEliminarPienso lo mísmo que tú: cortina de humo
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