sábado, abril 02, 2011

"Cuando te callas,.."

18 comentarios:

  1. En principio, callarse no implica necesariamente el silencio. Supone muchas veces una actitud de espera mientras la mente busca el momento y la palabra que permiten el encuentro tantas veces pretendido y al tiempo postergado. Puede que el mutismo se prolongue en exceso simplemente porque no se tiene nada que decir, bien porque ya se ha dicho todo o porque los rumbos derivan en caminos distintos que alejan la posibilidad de que la palabra sirva para algo más que para recurrir al tópico que nada resuelve. Sobreviene entonces el olvido al que conduce la boca cerrada en presencia de quien en otro tiempo fue destinatario del pensamiento verbalizado. Por eso, el breve texto que encabeza esta entrada ha de ser entendido más como un proceso que como un comportamiento estático. Testimonia las derivas a que conduce la vida de relaciones amparadas en el inmenso valor de la palabra dicha. Un abrazo, Luis.
    Tardaré en volver a saludarte en tu salón virtual, pero sabes que te sigo.

    ResponderEliminar
  2. Y sin embargo, Luis Antonio, hay silencios que son encuentros, puentes que van más allá de las palabras.

    Un saludo.

    ResponderEliminar
  3. Bona nit Luis, Te paso dos frases sobre el silencio:

    Soy tan partidario de la disciplina del silencio que podría hablar horas enteras sobre ella.
    (George Bernard Shaw)


    Es mejor estar callado y parecer tonto, que hablar y despejar las dudas definitivamente. Groucho Marx.

    A ver que hace el Barça...

    ResponderEliminar
  4. Mejor callar si no se tiene nada que decir, así como también es mejor callar que herir con palabras a alguien, otras veces ese silencio puede significar una sinfonía del amor... depende mucho de la circunstancia.

    Me encantan los haikus, por cierto... ¿es tuyo?

    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. A MARÍA:

    Si no fuera mío citaría al autor, que es lo que procede, ¿no? Ya sé que tú acostumbras a firmar todas las entradas de tu blog.

    El silencio, como bien dices, puede interpretarse de muchas maneras y no seré yo quien invada el terreno que sólo compete al lector

    Besos

    ResponderEliminar
  6. A MARÍA:

    He omitido decirte que la foto la he "robado" de Google y no cito al autor porque lo ignoro.
    Más besos

    ResponderEliminar
  7. Sencillamente me encanta. Los haikus son pequeñas obras de arte.
    Me encantaría citarlo en mi blog de literatura, si me das tu permiso Luis Antonio.
    http://negrasorquideas.blogspot.com
    Besos

    ResponderEliminar
  8. Hay un tiempo para callar y otro para hablar. Lo ideal sería saber cuando toca uno y cuando otro.... porque tenemos una tendencia enfermiza a equivocar los tiempos.

    Un beso, Luis

    ResponderEliminar
  9. Hermoso haiku. Sobre el silencio han hablado Maquiavelo, el abate Dinouart, y Baltasar Gracián, si bien cada uno desde diferentes perspectivas.
    Me quedo con la frase de A. Dinouart: "solo se debe dejar de callar cuando se tiene que decir algo más valioso que el silencio".

    ResponderEliminar
  10. Los silencios
    nos invitan a hablar
    sin decir nada

    A veces sin palabras se puede expresar más que abriendo la boca.

    Besos Luis

    ResponderEliminar
  11. Un silencio demasiado productivo para algo tan extenso como el olvido.

    ResponderEliminar
  12. Lo más hermoso que tienen los haikus es la capacidad de decir tanto de un modo tan breve.

    En ellos puede estar el origen de un relato completo. Son como llaves que abren puertas infinitas, sugieren, esbozan y se extienden hasta el infinito.

    Tienen tantas lecturas como lectores según se puede observar
    a través de los comentarios que me han precedido.

    Me ha gustado especialmente el que nos has ofrecido porque habla nada menos que del silencio y del olvido. Si alguien a quien amamos se parapeta detrás de un silencio prolongado, de alguna manera está sembrando una distancia cuya cosecha inevitable es el olvido: es la necesidad del olvido para protegernos del dolor.

    Si es tuyo te felicito, Luís Antonio y si no lo es, también.

    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Silencios, que son tan elocuentes, o más... que un torrente de palabras.
    Aunque el olvido, es un recurso paliativo excepcional... ¿qué sería de nosotros sin él? ¿nos aplastarían los recuerdos?

    ResponderEliminar
  14. EL HAIKÚ:

    TEORÍA:

    “El haikú, derivado del haikai , consiste en un poema breve de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas respectivamente sin rima. Es una de las formas de poesía tradicional japonesa más extendidas. Tradicionalmente el haikú, así como otras composiciones poéticas, buscaba describir los fenómenos naturales, el cambio de las estaciones, o la vida cotidiana de la gente. Muy influido por la filosofía y la estética del zen, su estilo se caracteriza por la naturalidad, la sencillez (no el simplismo), la sutileza, la austeridad, la aparente asimetría que sugiere la libertad y con ésta la eternidad.

    PRÁCTICA:

    1.- A veces tenemos ideas o pensamientos que nos rondan por la cabeza y que responden o no a experiencias personales. Es importante abreviarlas al máximo:

    “El silencio agudiza/incrementa/engorda el olvido”

    Personalizo esa idea abstracta:

    “Tu silencio acrecienta el olvido”

    2.- Paso esa idea a la estructura poética del haikú:

    “Tu silencio
    acrecienta
    el olvido”

    Como no cumple las reglas métricas: 5 + 7 + 5 sílabas, voy buscando variantes de aproximación, pero sin traicionar a la idea:

    “Cuando no hablas,
    enriqueces la cosecha
    del olvido”

    Sólo he conseguido el primer verso satisfactorio con la idea y con la métrica. Insisto:

    “Cuando te callas,
    abonas la cosecha
    del olvido”

    Me gusta más el verbo “callar” que la negación del “hablar”
    Ya tengo los dos primeros versos, pero no sé cómo convertir el último “del olvido” de sólo cuatro sílabas en uno de cinco...

    No encuentro un sinónimo de “olvido” de cuatro sílabas para que sumado a "del" resulten las cinco establecidas como norma métrica del haikú....

    Me lleva bastante tiempo, hasta que tomo la decisión de cambiar dicho verso a plural aunque suponga traicionar la idea inicial. La métrica, sin duda, condiciona...

    “Cuando te callas,
    abonas la cosecha
    de los olvidos”

    3.- Busco una imagen como fondo de esta estrofa. Con Google, todo resuelto, aunque la asociación del texto con la fotografía - gracias al PHOTOSHO - sea totalmente arbitraria.

    4.- LO MEJOR DEL HAIKÚ, sin duda alguna, son los comentarios que provoca. El mérito es de los comentaristas, por supuesto. El haikú sólo ha sido el pretexto...

    Gracias a todos por enriquecer una estrofilla tan simple como ésta con el caudal de vuestros comentarios.

    ResponderEliminar
  15. No me puedo callar. Me ha encantado todo el proceso que haces con el haikú (bueno, lo del photoshop no me queda muy claro)y lo de la estrofilla me ha llegado al alma.

    Que vengo cuando puedo a verte, que no me olvides, que voy a tope.

    Te cuento, la palabra clave que me sale para que esto te llegue es "comer", pero yo ya me he comido todos los Thortons que me traje de Londres.

    Venga, besos haikuqueros. ¡pero qué bien se te dan!

    ResponderEliminar
  16. A ANGIE:

    Mediante el PHOTOSHOP puedo escribir en una imagen. Es una de las muchas funciones que posee este programa de aplicación fotográfica.

    Me han encantado esos besos tan "especiales" Ahí van los míos...

    ResponderEliminar
  17. El haikú, perfecto y hermoso, me ha encantado.

    La lectura de los silencios creo que puede ser múltiple, a veces implica olvido, otras admiración,tu haiku, en este caso, me ha dejado sin palabras, me he callado, pero no olvidaré volver por aquí apor más, o mejor sigo...

    Besos

    ResponderEliminar

EL PLEONASMO EN LA LENGUA ESPAÑOLA

El pleonasmo es una figura retórica que consiste en agregar palabras a modo de repetición, que no son necesarias, con el fin de resaltar una...

VANESSA INCONTRADA: Hija de padre italiano y madre española: Nacida en Barcelona. Rostro del Año

VANESSA INCONTRADA: Hija de padre italiano y madre española: Nacida en Barcelona. Rostro del Año
LLEGAR HASTA EL FINAL TIENE PREMIO

De ANGIE para LUIS ANTONIO

"Haikuquero es
el beso que se entrega
cuando hay querer".