Vivimos en una sociedad – ¿siempre ha sido así? - en la que se confunde la “fuerza de la razón” con la “razón de la fuerza”. Por eso son más notorios los que gritan, los que interrumpen, los que no saben ni quieren escuchar, los escandalosos, los vocingleros... En mi pueblo les llaman los “bocazas”.
En estas circunstancias, uno no puede dejar de rememorar lo que dijo aquel mítico activista de los derechos civiles, Martín Luther King, hace unos cuantos años: “Tendremos que arrepentirnos en esta generación no tanto de las malas acciones de la gente perversa, sino del pasmoso silencio de la gente buena”.
Y también decía – no recuerdo la frase exacta – algo sobre los que callan y la complicidad que entraña esa actitud.
Luis Antonio, hoy coincidimos en la palabra: SILENCIO.
ResponderEliminarEl pasmoso silencio de la buena gente, que mucha hay, es el mejor aliado de los políticos que corrompen el mundo. Que si en algo es global es por la corrupción. Guardar silencio (aunque sea apoyando con el voto que poco ruido hace) se llama complicidad (así lo añades al final).
Un saludo con voz rotunda.
a ver si de una vez nos cansamos de estar callados y hacemos que nuestra voz se escuche . un besin de esta asturiana que opina que como sigamos callados esto va a ir de mal en peor.
ResponderEliminarDos frases sobre el silencio:
ResponderEliminar-La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio.
(Marco Tulio Cicerón)
-Cuando la voz de un enemigo acusa, el silencio de un amigo condena.
(Ana de Austria)
Me voy de aqui haciendo mutis por el foro...
LUIS UN ABRAZO.
Sí, suele decirse, y con razón, que "los educaditos" no salimos a la calle, no gritamos, no nos rebelamos,...
ResponderEliminarQué razón lleváis Luther King y tú.
Hay tantos silencios... Hay tantas cosas en que todos somos cómplices... La mayoría sólo hablamos cuando ello no nos supone ningún riesgo y sin implicarnos demasiado. La filosofía que subyace a nuestro modo de vida es la de "aprovéchate y no pienses demasiado", "coge tu parte del pastel y no te preocupes de quien venga después". Hay silencios interesados, hay ignorancia voluntaria, hay desinformación conseguida tenazmente, hay mucha estulticia en los mass media, en las opiniones populares... Y sí, es mejor no saber. Saber parece que nos debe comprometer. Y estos dos conceptos: saber y comprometerse son ajenos a la filosofía del placer que ha de tener como fundamento en buena parte la ignorancia voluntaria, y, por ende, el silencio. ¿Para qué hablar? ¿No se nos ha dicho que uno es esclavo de sus palabras y señor de sus silencios? Creo que fue un jesuita el que formuló esta máxima. Pues eso, un poco de jesuitismo no está mal. Pero no hay que enfadarse; todos, y el que firma esto el primero, sabe que el silencio está bien. Hablar comporta más problemas que estar calladito, y, entretanto, a lo nuestro. Un abrazo.
ResponderEliminarEs muy cierto, lo de las frases, pero hay que agregar que con silencios bien elegidos también se dice mucho, nos falta simplemente aprender a usarlos.
ResponderEliminarSaludos
El silencio siempre es cómplice: complicidad fraternal o criminal. No hay término medio, salvo que seas la víctima.
ResponderEliminarEl silencio puede ser muchas cosas: resignación, aceptación. Hay mucho de comodidad, de no pringarse si no nos toca directamente, de cansancio, de aburrimiento, de tirar de los demás. Pero creo que callarse no conduce a nada bueno, lo que no se dice no existe. Hay momentos en que no hay que callarse y entonces es cuando te respetan.
ResponderEliminarY luego están los que hablan y esperan que los demás actúen; los que esperan que hables por ellos, los que hablan pero por detrás, para ver si otros lo dicen donde corresponde...
Existe una fábula: "El águila que se creia gallina". Se puede aplicar al mundo actual.
ResponderEliminarHay un dicho "quien calla otorga", por lo tanto cuando no hacemos presente nuestra disconformidad, ya sea en nuestra familia, en el trabajo, en la política, en lo económico etc., estamos conformes con lo que acontece, por lo tanto, no provocamos los cambios necesarios.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Que el silencio sea el que buscamos los serenos, pero no el cobarde, el malsano.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo Luis
Alicia
No creo que el silencio vaya ligado exclusivamente a la gente buena. También los perversos a veces actúan en silencio, y no son ellos, sino sus obras (malas ) las que hablan.
ResponderEliminarEl silencio, cuando las cosas van mal, puede deberse al miedo o a la desconfianza. O a ambas.
Miedo, porque no se cree en el apoyo, ni en la unanimidad de esa queja. Ser uno solo el que se visibiliza, parece ser sinónimo de atraerse problemas.
Desconfianza, porque hay demasiada experiencia detrás de que las protestas no siempre han dado el resultado deseado.
Las conquistas han costado siempre demasiado. Demasiado para el pobre resultado. Todo en la historia han sido conflictos, salpicados con escasísimos periodos de paz.
Es como si para arrancar una manzana se tuviera que hacer un esfuerzo como para alcanzar el Everest.
Apenas dejan a la gente míseros periodos para disfrutar la paz. ¿Disfrutar? ¿pero sabemos de verdad disfrutar la paz?
No, no lo sabemos. Nunca lo sabremos, porque el conflicto está en nuestra esencia, las divisiones están en nuestra esencia, la confrontación está en nuestra esencia.
Ahora podría haber habido un entonamiento de mea culpa por parte de un mercado, que es como hace mil años, el monarca, el señor feudal, el aristócrata, el emperador, la Iglesia...
Pero no lo hay, porque los culpables se sienten como abstracciones. Solo se visibilizan en generaciones posteriores.
Se sabrá algún día quien montó de verdad esta crisis, lo estudiarán en los libros de historia los niños del futuro.
Unos niños que al igual que hoy, tendrán que aprenderse mil nombres de reyes y gobernantes anteriores, y sin embargo no conocerán el de ninguno de su propia época.
Este retroceso del bienestar estaba cantado. Había cogido una carrerilla de eterno despegue, que no era viable, pero nadie quería aceptarlo. Cuando se está en la euforia de la subida, nadie quiere escuchar a agoreros.
Pero los optimistas antropológicos no tienen fórmulas, tienen solo optimismo, y eso no es útil para resolver los problemas de la jungla.
El silencio, según las circunstancias, puede ser signo de muchas cosas:
ResponderEliminarCobardía, prudencia, ignorancia, miedo, estrategia, inteligencia, falta de reflejos.... Unas veces es bueno y otras malo.
Saber cuando hay que hablar y cuando callar es algo que creo que nadie domina a la perfección.
Un beso, Luis, y buen finde.
Aunque estoy de acuerdo contigo Luis, tengo que decir que a veces los silencios suelen decir más que las palabras y las razones.
ResponderEliminarBesos y feliz fin de semana querido amigo
Respondo a la pregunta con la que comienzas el texto: siempre ha sido así. Incluso te diría que hemos conseguido con el tiempo que muchos tartamudos pudiesen expresarse. Achacar al hoy cosas que existen desde que el mundo es mundo puede ser un buen revulsivo para actuar ante lo que nos inquieta pero no por ello es real.
ResponderEliminarEl silencio es una opción, y tal como dice el comentarista Anónimo de arriba, no tiene porque ir acompañado por una actitud cándida o pasiva. Los peores crímenes, las más sórdidas decisiones, los males que más nos afligen nacen y se desarrollan en silencio.
Parece ser que sí, Luís Antonio, nos hemos acostumbrado a callar, a recibir las injusticias sin protestar, sin levantar la voz. Debe ser el efecto rebote de vivir en este mundo global en el que permanentemente nos estamos enterando de las desgracias que ocurren en cada lugar del mundo, lo que ha provocado esta anestesia, esta sensación de que no va con nosotros lo que está pasando.
ResponderEliminarAunque, a la vista de lo que está ocurriendo en Túnez, algo parece estar cambiando en esta aldea global...
Estaremos al tanto.
Un fuerte abrazo.
El silencio sólo es cómplice antes ciertas circunstancias. En otras ocasiones, el silencio es la mejor respuesta. O a veces nos quedamos en silencio porque nos dejan sin palabras..
ResponderEliminarBesos!
Dicen que quien calla, otorga. Luego, los silencios no son inútiles, sino que tienen una dirección. La dirección del que manda, del que dirige el cotarro. Pero también, dentro de estos que callan, hay muchos que lo hacen por abulia, y estos también entran en el mismo saco, y de eso se aprovechan los políticos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Estimado Luis Antonio, me ha gustado tanto tu entrada que creo que me ha inspirado una a mí... sobre el mismo tema... un abrazo...
ResponderEliminarEl peor problema es lo orgullosos que están los bocazas de sí mismos y su "no intención" de cambiar.
ResponderEliminarGRACIAS A TODOS LOS COMENTARISTAS POR SUS RICAS Y VARIADAS APORTACIONES. LA ENTRADA NO TENÍA MÁS OBJETIVO QUE RECOGER OPINIONES PARA CLARIFICAR Y ENRIQUECER LAS PROPIAS Y LAS AJENAS. OBJETIVO ALCANZADO CON CRECES. CREO QUE TODOS SOIS PERSONAS BUENAS Y HABÉIS TENIDO LA VALENTÍA DE NO ENMUDECER ANTE ESTA INVITACIÓN A HABLAR. ¿PASA LO MISMO EN LA REALIDAD SOCIAL QUE NOS ENVUELVE? ME TEMO QUE NO.
ResponderEliminarSupongo que Luther King echa a faltar la palabra de los que tienen más que decir que callar, pero eso habría que ubicarlo en el contexto histórico y social que él lo planteó.
En lo que a mí respecta, cada vez tengo que hacer más esfuerzo para ocultar el hastío que me producen los excesos verbales. Hay personas que no saben estar calladas y otras que se cansan de escuchar a las anteriores. Pienso que el silencio debería ser la virtud de todos los que carecen de otras. Uno se puede arrepentir de no haber hablado en uno u otro momento, pero es mucho más grave arrepentirse de haber hablado en exceso y sin sensatez alguna. Además, nadie ignora que hay silencios que hablan. Y otros que hieren, ya lo sé. Guardaríamos más silencio si recordásemos lo que ocurre con frecuencia cuando se interpreta mal lo que decimos o lo que dicen los demás. La de problemas que se evitarían. Ante este panorama se hace preciso reivindicar el papel del silencio. Del silencio creador, del silencio de la paz interior, del silencio que nos humaniza porque permite descubrirnos en profundidad, del silencio que nos pone en contacto con nosotros mismos...
Un cordial saludo para todos
No todo el silencio es complice (X. Luis Manteiga Pousa)
ResponderEliminarNo todo el silencio es complice (X. Luis manteiga Pousa)
ResponderEliminarMuy bueno el comentario de Vanessa (XLMP)
ResponderEliminarMas que mil palabras inutiles, vale una sola que otorgue paz (Buda)
ResponderEliminar- Los tertulianos, y algunos otros, suelen opinar de cualquier tema indistontamente. Luis Manteiga Pousa
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