Leo la noticia de que las
autoridades suecas creen que con un día laboral más corto, los trabajadores se
sentirán mejor física y mentalmente. Se espera que esta reducción horaria
aumente la eficiencia del trabajo, ahorrar fondos estatales y abrir nuevas
oportunidades laborales. En principio, se trata de una prueba, pero los
responsables del proyecto tienen plena confianza en los resultados. La prueba
se experimentará con trabajadores municipales de Gotemburgo. Parece ser que ya
se probó en esta localidad a nivel de una fábrica de automóviles y los
resultados fueron alentadores según los mismos empresarios.
La iniciativa ha recibido fuertes
críticas de la oposición política a la izquierda, que acusa al líder de este
proyecto de hacer mero electoralismo.
Personalmente tengo una imagen
tan positiva de este país que me facilita tener casi la certeza de que será un éxito.
No me atrevo, sin embargo, a manifestar los prejuicios que me embargan cuando
sitúo dicha iniciativa en nuestro ámbito más mediterráneo...
He estado por Suecia en un par de ocasiones, hace muchos ya, también es una sociedad que me resulta atractiva y, en otros casos, me descoloca.
ResponderEliminarTengo una amiga sueca, casada con español y residente en Madrid. Te contaré una anécdota que resume bien el sentido común nórdico.
Me contaba esta amiga su sorpresa, al ver comos sus conocidas españolas se escandalizaban, incluso se preocupaban, al encontrar un preservativo en la habitación de sus hijos, ya que esta amiga se los compraba al suyo, sin mayor problema, y por el contrario, decía ella, no parecía perturbarlas tanto descubrir un paquete de tabaco en la habitación de los hijos, pues afirmaba, con buen criterio, lo malo que es fumar para la salud… y lo estupendo que es el sexo, jaja. Ya ves, sueca ella.
Obviamente, hay que prestar atención a lo bueno y útil que puedan mostrarnos, todo el mundo ha copiado cosas de su modelo de bienestar, a pesar de las grietas que puedan tener actualmente.
Como buenos luteranos, las sociedades nórdicas son profundamente pragmáticas, salvando los matices entre unos países y otros (por los que también me he movido), lo que les resta esa “cierta despreocupación meridional” para vivir la vida.
Por eso, en la madurez, suelen caer en el sopor existencial, la melancolía… aspectos muy bien retratados por Bergman en sus películas…
Muchos acaban viviendo en el Mediterráneo, jubilados o no, deseosos del clima sureño, pero también queriendo dejar de ser políticamente correctos a cada instante, bajo la tutela asfixiante de "Mamá Estado", y embargarse del ritmo meridional, que quita hierro a mucha cuestión grandilocuente.
"En todas partes cuecen habas"
Un abrazo, amigo Luis Antonio.
Visité Suecia hace unos años y sólo puedo hacer referencia a lo que entraba por los ojos: civismo, limpieza, casas aparentemente muy confortables, educación...
EliminarQue tengan, a cierta edad, debilidad por el clima mediterráneo no me sorprende nada y que quieran liberarse de la protección del Estado, tampoco
Me consta que el bienestar sueco era tan impresionante como insostenible. Allí, el ‘Estado Nodriza’ se ocupaba de todo, sin oferta privada significativa, lo que provocó una fiscalidad confiscatoria. Ante el riesgo de bancarrota, se vio obligada a reinventar el Estado de Bienestar de acuerdo a cuatro políticas: a) bajar los impuestos; b) limitar el tamaño del Estado; c) desmontar los monopolios públicos; y d) crear condiciones de libre mercado que permitieran la expansión de un competitivo sector privado.
Un aspecto importante de este proceso fue la apertura a la oferta privada de los servicios de salud y educación sufragados por el Estado. Se crearon diversos sistemas de bonos o vales, que permiten la libertad de elección ciudadana entre toda la oferta, tanto pública como privada. Así, más de una tercera parte de la atención primaria de salud financiada públicamente es brindada hoy por proveedores privados. De acuerdo al mismo modelo reciben su educación secundaria más de una cuarta parte de los jóvenes suecos. El secreto del éxito del país nórdico reside en su decidida apuesta por una libertad económica que consigue que las capacidades de cada uno redunden en beneficio de todos. El resultado de esta apertura es su sexto puesto en el Global Competitiveness Index 2016/17.
Todo es mejorable y lo de que "en todas partes cuecen habas", incuestionable
Un abrazo, amigo Paco
Les envidio poco y también tengo amigos que me hablan de las bondades de esos países pero viendo películas de Bergman, de Dreyer o de Trier. Leyendo a Mankell y a su personaje Wallander y a otros autores de sus novelas negras, su pintura, incluso su música clásica noto un malestar de fondo, un runrun poco estimulante y hasta me parece lógico que la inhospitalidad de la vida en aquellas latitudes se compense con una calidad de vida lo suficientemente estimulante como para que los escandinavos no abandonen la partida.
ResponderEliminarUn abrazo
En Suecia, supongo que hay de todo, como en botica, pero la impresión que da la sociedad de aquel país es globalmente positiva.
EliminarEnvidiar no es aconsejable. Prefiero utilizar el verbo admirar, advirtiendo que mi conocimiento de dicho país es muy relativo, pero ya quisiera yo que los problemas de la mayor parte de la sociedad mundial fuesen los de los suecos...
Un abrazo
LUISANTONIO he visitado en varias ocasiones Suecia y en una de ellas concretamente a Gotemburgo y estuve en " esa " fabrica de automóviles , hace ya algunos años de ello , pero te diré que me causaron curiosidad varias y distintas cosas sobre lo que ya entonces vi allí , todas relacionadas con la forma de hacer las cosas mas cotidianas de sus ciudadanos, algunas de ellas están EMPEZANDO ahora a querer hacerse en España , pero es indudable que somos bastante diferentes a ellos . Saludos
ResponderEliminarDoy mucho crédito a tus palabras porque tienes un conocimiento más profundo de esa sociedad. Si, al menos, los imitamos en asuntos positivos, mejor que mejor... Eso no significa perder la identidad que nos caracteriza.
EliminarLas diferencias, si sabemos aceptarlas, nos enriquecen.
Saludos muy cordiales
Si no me equivoco, este experimento fue del 2015 y en el 2017 lo eliminaron. España está más avanzada. Hay funcionarios que no hacen ni las seis horas, legalmente.
ResponderEliminarMe encanta tu sentido del humor, doctorvitamorte.
EliminarUn abrazo
Ahhh , no para los empleados privados, pues me quedo con el sistema español , aunque nos dejen atrás, en varias cosas , los nordicos .
ResponderEliminarMe acordé de aquel chiste , que decia que va un tio al ayuntamiento y pregunta :¿Trabajais por la tarde? , -no- fue la respuesta , no trabajamos de mañana , por la tarde no que no hacemos es venir . ^_^ .