Supongo que hay personas
que tienen la capacidad asombrosa y envidiable de reponerse en poco tiempo ante
la adversidad, pero no sé, a decir verdad, si abundan...
Sin embargo, la cruda realidad
es que no todos disponemos de ese resorte mental que activa la fortaleza
psicológica para superar la crudeza que caracteriza a determinadas
circunstancias.
Estos días, con la dichosa "pandemia
del coronavirus", son muy adecuados para analizar las respuestas que
las personas de nuestro entorno dan y damos a esa aflicción que embarga a no
pocos... Admiro a los que no pierden el sentido del humor y lo ponen de manifiesto
en estas circunstancias tan poco propicias para su cultivo. WhatsApp y otros medios nos brindan algún que otro destello de dicho humor que nos permite, como mínimo, esbozar
una tímida sonrisa...Que no es poco.
Tampoco hay que olvidar el
dicho de que "Tras la tempestad vendrá la calma"
Mientras llega esta, no quedará más remedio que aprender a caminar bajo la
tormenta...
Aunque me encuentre en primera línea de peligrosidad, he decidido que habrá que asumir lo inevitable si llega y decidir hasta qué punto me compensaría sufrir y aguantarme o montarme mi particular forma de rebelde despedida mundana. porque a partir de ahora la sociedad irá a peor y “los viejos somos una carga económica” para la mentalidad presente dominante y para el poder que sea, aunque para todo existan honrosas e idealistas excepciones .... mientras duren. A las mayorías presentes y futuras no les arriendo sus ganancias. Así de simple.
ResponderEliminarComprendo tu pesimismo. La coyuntura que estamos sufriendo no es para "tirar cohetes". Sin embargo, no nos queda más remedio que asumirla y sortearla como podamos y sepamos.
EliminarÁnkmo, Emejota
Estamos ante una incertidumbre y caos psicológico, miedo que nos invade, difícil sonreír, pero no queda otra que armarse de valor y pensar que saldremos de esta mi estimado Luis Antonio.
ResponderEliminarBesos enormes.
No tengo la menor duda de que saldremos de esto. El problema es saber cuándo y qué secuelas nos dejará este episodio inédito y de dimensión mundial.
EliminarMuchos besos, estimada María
Me haces pensar que los españoles sabemos encontrar palabras adecuadas desde hace siglos, para las circunstancias que se viven. Prueba de ello es el refranero castellano, los dichos y citas varias que adornan el imaginario del común. Al mal tiempo, buena cara, parece estar diciendo: total, de que te vale cabrearte. Si te amargas, te sentirá peor, Y no por ello va a cambiar la tesitura. Pero claro, hay circunstancias adversas muy densa, como la actual, pero al menos consolémonos con que encerrarse no es de lo más sangrante. Y más habida cuenta de los medios que hay para estar entretenido, incluso cuando hay riesgos de chocar con la familia. Lo malo también es si nos da en pensar la que se viene encima en materia de desgaste económico, tanto para trabajadores por cuenta propia como para empresas como para la economía en general. Pero habrá que estar a las duras y a las maduras, también, ¿no?
ResponderEliminarNos seguiremos solazando por estos medios, tratando de consolarnos unos a otros y sobre todo deseando que no nos toque la mala lotería. Que salgamos indemnes del contagio. Lo demás habrá que hacerlo frente en su momento.
Salud más que nunca, Luis Antonio.
Es imprescindible poner todos los medios para no caer en una psicosis incontrolada. El tiempo y el enclaustramiento que nos impone esta circunstancia hay que aprovecharlo como mejor sepamos. Y hay que pensar que esto acabará un día u otro. Ya habrá tiempo para analizar y sacar conclusiones. Aventurar miserias no conduce a nada bueno. No perdamos la esperanza
EliminarUn brazo, amigo
Lo que hoy se llama resilencia quizás está en exceso valorada por los especialistas de la felicidad, esos seres privilegiados que tienen soluciones para todo con una receta mágica. En ocasiones es la insistencia de estos señores de que todo es solucionable con una buena disposición individual la que nos lleva a no valorar la simple aceptación de las cosas y sentirnos frustrados por no ser más positivos tal como ellos recomiendan.
ResponderEliminarCuidate.
Ahora más que nunca necesitamos creer que hay soluciones para casi todo.
EliminarTambién te deseo que te cuides mucho. Es lo que toca y confiar en que tras la tempestad vendrá, como mandan los cánones, la calma
Un gran abrazo, amigo Krapp
Un abrazo fuerte (libre de virus, es lo bueno de los blogs), amigo Luis Antonio.
ResponderEliminarCuídate mucho y ánimo ;)
Gracias, Paco
EliminarLo mismo te deseo acompañado de otro abrazo igualmente sano
Supongo que el refranero tiene sus porqués... y cada cual le hará el caso que considere según su buen parecer y circunstancias... he de confesar que a mí me gusta bastante el refranero... me recuerda mi infancia y el lugar que me vio nacer...
ResponderEliminarCreo que el humor, en estos tiempos de confinamiento y pandemia, bien traído es como una especie de toma de tierra que nos ayuda a descargar el exceso de tensión acumulada observando celosamente las obligaciones ciudadanas que nos han pedido cumplir... acabamos de empezar y esto va para rato... un poco de humor oportuno e inteligente que camine entre la caricatura y la parodia respetuosa no viene mal, pienso, aunque habrá opiniones para todos los gustos...
Yo no suelo poner al mal tiempo buena cara, no se me da bien mostrarme alegre cuando estoy triste ni tranquilo cuando estoy preocupado... soy más emotivo que racional... pero no está nada mal saber afrontar la adversidad con tranquilidad, pues es más fácil ponderar soluciones que estando nervioso... pero sin dejar de ser realistas... es evidente que si están cayendo chuzos de punta no van a dejar de caer por el mero hecho de poner una buena cara o por ponerte en modo de pensamiento positivo...
Bueno, ahora toca lo que toca y espero que se resuelva pronto y con las menos bajas posibles... es cierto que siempre que ha llovido ha escampado, pero en este chaparrón, si no queremos mojarnos, nos tendremos que quedar en casa...
Abrazo
Nos quedaremos en casa y saldremos cumpliendo las normas prescritas, pero habrá que buscar la manera de llenar de contenido al tiempo de reclusión. Costará porque no tenemos experiencia de una vivencia de este tipo, pero también hay que contar con las propuestas y experiencias de los demás.
EliminarDe todo se aprende y habrá que agudizar el ingenio para asumir y superar esta prueba de la mejor manera posible o de la menos mala...
Abrazos
Bueno, no deja de ser un mensaje de ánimo, porque cuando lo decimos es porque estamos jorobados. Supongo que todas las emociones son necesarias y por eso existen, pero tenemos tendencia a decir que unas son buenas y otras malas. Cuando hay dolor hay que pasarlo y cuando hay alegría disfrutarla y tiene que haber buen balance. Harta de wasaps estoy, y ya no te digo de correos, se me salen por las orejas. En mi vida he pasado tantas horas seguidas delante de una pantalla. Ya pasará.
ResponderEliminarConcuerdo totalmente con tu reflexión. Habrá que compartir las pantallas con la música, con la lectura, con algún simulacro de ejercicio físico...Y confiar que esto tendrá su fin. El problema es saber cuándo...
EliminarAh! Cuídate mucho. Besos
ResponderEliminarLo mismo te deseo
EliminarBesos y abrazos, estimada Angie
Pues a seguir cuidándonos mi amigo,
ResponderEliminary que pronto termine esta pesadilla,
fue un placer llegar hasta aquí.
Besitos dulces
Siby
El placer es mutuo.
EliminarBesos y abrazos, estimada Siby
Paciencia y barajar, querido amigo, no queda otra. Pasaremos altibajos emocionales. Después de esta euforia vendrán tiempos de desasosiego. Hay que resistir: otros tiempos fueron peores y nuestros antepasados lo hicieron. Y hay que apoyar a los que se vengan abajo sin negarles el derecho a su tristeza.
ResponderEliminarUn abrazo. Espero que todo vaya bien por allí.
Lo has dicho todo y en pocas palabras. Sólo se me ocurre decirte que lo comparto en su totalidad.
EliminarUn abrazo, admirado y estimado Pedro