Resulta absurda la prohibición de publicar sondeos durante los últimos cinco días de la campaña electoral establecida en la Ley Electoral de 1985, supone una clara limitación de la libertad de expresión, impropia de una democracia supuestamente consolidada como la nuestra. Hecha la ley, hecha la trampa: El Periòdic d'Andorra los publica y cualquiera puede acceder a ellos a través de Internet. Con frecuencia, dichos sondeos se equivocan porque lo que vale de verdad es el voto depositado en las urnas. Lo demás son aproximaciones, un tanto interesadas por quienes patrocinan dichos sondeos...
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario