lunes, julio 30, 2012

La inteligencia y el “toque” de los naipes.



Tuve un profesor en la Normal de Magisterio que siempre nos estaba machacando con las mismas ideas sobre la educación,  la inteligencia y el provecho que podía o no sacarse de ella. “La inteligencia – nos decía con énfasis – no sirve de nada si no se utiliza para resolver problemas concretos que nos plantea la vida”. Y a continuación, el reiterado símil con los juegos de cartas: “En la vida ocurre lo mismo que en el juego del guiñote (1). Nos reparten unas cartas al azar y puede ocurrir que sean buenas, malas o regulares. Es mejor tenerlas buenas, pero al final  el que las sabe jugar es el que gana”. Y acostumbraba a finalizar su perorata diciendo que en la escuela se pretende enseñar a jugar bien las cartas que a cada uno le han tocado en suerte...

En el guiñote  como en cualquier otro juego de naipes es evidente que, a igualdad de cartas, gana el que mejor sabe jugarlas. Sin embargo cuestiono lo que nos decía dicho profesor, pues  la experiencia me viene poniendo de manifiesto una y otra vez que a poco que se sepa “tocarlas”... es muy difícil perder con buenas cartas.

Pero con el principio que albergo más dudas – y bien que me pesa -  es con el de que en la escuela se enseña a jugarlas...

(1). Guiñote: Según el Estatuto de Aragón (oficioso) de Joaquín Carbonell y Alberto Miranda y en su artículo 16:

“El guiñote es el juego por excelencia de Aragón. En él se manifiesta el brío y la prosopoya·

“El guiñote para el aragonés es una demostración de talento, como para el ruso el ajedrez, para el argentino el psicoanálisis o para el alemán la física nuclear”

martes, julio 24, 2012

ESPAÑA, Auto suicidio



Xavier Sala i Martín es un profesor de Economía de la Universidad de Columbia. También ha ejercido la docencia en Yale, Harvard y la Pompeu Fabra de Barcelona. Es columnista de La Vanguardia, hace apariciones semanales en Radio RAC1, así como en el programa de televisión Divendres de TV3.
Sala-i-Martin es reconocido como uno de los economistas líderes en el campo del crecimiento económico y está considerado entre los economistas más citados del mundo para las obras producidas en la década de 1990. Una de sus obras más conocidas es la titulada “La economia liberal para no economistas y no liberales”
En su día leí este artículo, pero al enterarme que ha sido retirado de la versión on-line de La Vanguardia  no he dudado nada en colgarlo en esta bitácora porque vale la pena dedicarle unos minutos. La ironía brilla por doquier...

Auto suicidio, de Xavier Sala i Martín en La Vanguardia 17-06-2012 
A ver. Pensemos... 
Si el peor enemigo de un país diseñara un plan para destruir su economía, ¿qué haría? 
Pues supongo que intentaría desacreditar sus instituciones más importantes para sembrar la desconfianza entre los ciudadanos y que estos dejaran de consumir e invertir. 
La estrategia podría empezar por desprestigiar a la primera autoridad (sea rey o presidente de la república) llevándole a cazar elefantes con una señorita alemana. 
En medio de la cacería le obligaría a resbalar y a romperse la cadera para que tuviera que volver urgentemente a su país. 
Así todo el mundo vería cómo se gasta decenas de miles de euros en un momento en que sus conciudadanos se hunden en la miseria. 
Para rematar la faena, forzaría a un familiar próximo (por ejemplo, un yerno) a apropiarse de millones de euros explotando su influencia y luego expondría sus travesuras a la luz pública. 
Es importante empezar sembrando dudas sobre la conveniencia de mantener en el poder a la primera familia del país. 
A continuación exigiría a los miembros del Parlamento que siguieran una regla simple: 
“Vota siempre lo contrario de tu adversario incluso cuando tiene razón e incluso cuando propone lo mismo que proponías tu en la anterior legislatura”. Es crucial que la ciudadanía pierda la confianza en su clase política. 
Seguiría con los más altos órganos del poder judicial. 
Por ejemplo, haría que el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial se gastara dinero público para pasar fines de semana románticos en la Costa del Sol con su chófer (masculino). 
Una vez malversado el dinero filtraría las facturas para desatar el escándalo y, acto seguido, haría que los jueces compañeros pusieran trabas a la investigación para proteger a su amigo. 
Intentaría que eso pasara justo en el momento en que alcaldes, presidentes de comunidades y parlamentos y altos cargos de las administraciones del Estado están siendo juzgados por corrupción… ¡por esos mismos tribunales! 
La desconfianza en la justicia es el mecanismo más seguro para hundir a un país. 
Una vez desacreditado el jefe del Estado, las altas esferas de la política y la justicia, iría a por las élites económicas. 
Aquí se podría lanzar un ataque contra uno de los empresarios más prestigiosos del país, posiblemente un banquero, destapando unas cuentas con miles de millones de euros en Suiza y, una vez destapado, haría que el Gobierno no le castigara. 
Además, indultaría a uno de sus altos ejecutivos previamente condenado por sentencia firme (SANTANDER). 

El siguiente paso consistiría en dilapidar miles de millones de euros de dinero público para evitar la quiebra de unos bancos y cajas por amigos, parientes y correligionarios políticos. 
Y lo haría justo en el momento de pedir sacrificios y recortes de miles de millones a los ciudadanos. 
Es esencial que la gente confunda libre mercado con amiguismo incestuoso entre poder empresarial y político. 
Sin abandonar el terreno económico, obligaría al Banco Central y a la Comisión Nacional del Mercado de Valores a autorizar la salida a bolsa de uno de los mayores Bankios del país, a sabiendas de que estaba arruinado.
Eso haría que miles de ciudadanos perdieran sus ahorros comprando acciones de una empresa que ya estaba muerta antes de nacer. 
Para hundir a un país, hay que conseguir que la gente de a pie pierda sus ahorros y que las entidades supervisoras que (en teoría) les protegen, contribuyan a su ruina. 
Y finalmente, pondría a un gobierno incompetente a la hora de gestionar problemas económicos. 
De hecho, lo haría durante dos legislaturas seguidas y con partido distinto en cada una de ellas. 
Eso demostraría que la incompetencia no es de un solo partido sino de la clase política en su conjunto. 
Los sucesivos gobiernos negarían las crisis económicas y echarían la culpa de todo a los extranjeros malignos. 
Como traca final, haría que las autoridades europeas rescataran al sistema bancario del país y obligaría al presidente del Gobierno a negar repetidamente que se trata de un rescate. 
También le forzaría a mentir argumentando que el rescate no tiene condiciones (o sólo “condiciones favorables”), cosa que los mismos europeos negarían unas horas más tarde. 
Eso refrescaría la memoria de todos, recordándoles que quienes mandan son los mismos que mintieron con los “hilillos de plastilina” y las “dos vías de investigación”. 
Es más, cuando la sociedad pidiera la comparecencia del presidente ante el Parlamento para dar explicaciones, le obligaría a decir (sin que se le escapara la risa) que su agenda internacional está tan llena que no hay tiempo para ir al Parlamento… y acto seguido cogería una avión oficial y me lo llevaría a ver un partido de fútbol con cargo al contribuyente. 
La mofa y el escarnio llegarían a todos los rincones del planeta: “You say tomato, I say bailout”. 
Esa sería la puya final ya que, unida al desprestigio de todas las grandes instituciones del país, eliminaría toda esperanza de salir del profundo agujero. 
Los ánimos de la ciudadanía se hundirían, por fin, en la más profunda depresión. 
Y ese sería el plan que diseñaría el peor enemigo de uno. 
¡Sí! Ya sé que es tan retorcido, maquiavélico y exagerado que parece improbable que nadie nunca lo pueda llevar a cabo… 
Pero nunca digas nunca porque siempre puede aparecer un país de pandereta cuyo peor enemigo sea él mismo y cuyas instituciones, todas y cada una de ellas, estén dispuestas a desprestigiarse a sí mismas ante el asombro del mundo entero, para conseguir el objetivo común: ¡el autosuicidio! 


www.salaimartin.com

viernes, julio 20, 2012

LA BELLEZA


Dichoso: Adjetivo yuxtapuesto que también se aplica a algo que resulta molesto o fastidioso

Imagen: La he sacado del Facebook, Susi de la Torre que comparte la foto de Durmiendo en una papelera


domingo, julio 15, 2012

NUBES: HAZ Y ENVÉS...




Ayer, tendido en la arena junto al mar tembloroso y contemplando el cielo y la pugna silente o el divertido escarceo – vete tú a saber - entre un sol timorato y las nubes en caprichosa mudanza, me afloraron mil ideas y experimenté otras tantas sensaciones sobre el espectáculo poético y gratuito que nos brinda la naturaleza a todos, sin distinciones... En la exigua gragea de palabras que precede a este texto las he condensado todas.

martes, julio 03, 2012

MI CONCIENCIA



Es obvio que metí la pata en mi entrada anterior y que por más intencionalidad humorística que tuviese nadie tiene por qué captarla ni compartirla. Por eso pedí disculpas a las personas que se incomodaron y tengo que agradecer a las demás su ponderación, su tolerancia, sus  modales y su silencio. Sé que actuar en conciencia, como fue en mi caso, no me exonera de la responsabilidad moral que haya podido acarrear el contenido de  mi, a todas luces,  “desafortunada entrada”... Sin embargo, y aunque pueda parecer un tanto testarudo, no tengo mala conciencia sobre dicho episodio y sigo pensando que no ha tenido la gravedad que se le imputa. Al fin y al cabo lo único que hice fue presumir de la aportación del Barça a la Selección... Aunque no he hecho oídos sordos a los reproches recibidos del exterior – reitero las disculpas -  siempre he temido más a los dictados y broncas de mi conciencia.  Casi me atrevería a afirmar que ésta si peca de algo es de escrupulosa. Por eso me atemorizan sus reproches las más de las veces. Sin embargo en esta ocasión permanece callada. No sé si está dormida, aletargada, de vacaciones estivales o se ha vuelto laxa por culpa del calor y del color de "La Roja",   pero no ha sumado sus aguijonazos a las andanadas recibidas y esto me tranquiliza y me hace relativizar lo sucedido. Todos no tenemos la misma opinión sobre lo que está bien o mal, sobre lo que es oportuno o deja de serlo y sobre lo que es cómico o trágico... Y de ahí surgen las controversias. Lo que sí tengo claro es que, aunque sea una falacia,  cada persona debe seguir su propia conciencia. Y la mía no me ha condenado...todavía.




FOBIAS: TEMORES IRRACIONALES HACIA...(1)

Las fobias son temores extremos e irracionales hacia objetos, situaciones o actividades específicas. A  menudo, estos miedos generan una res...

VANESSA INCONTRADA: Hija de padre italiano y madre española: Nacida en Barcelona. Rostro del Año

VANESSA INCONTRADA: Hija de padre italiano y madre española: Nacida en Barcelona. Rostro del Año
LLEGAR HASTA EL FINAL TIENE PREMIO

De ANGIE para LUIS ANTONIO

"Haikuquero es
el beso que se entrega
cuando hay querer".