No creo que la lengua sea sexista. Si acaso lo será el proceso cultural que nos ha llevado en dicha dirección. La lengua, en definitiva, evidencia la realidad sociológica a la que sirve.
En las lenguas románicas es habitual, y así se nos ha venido enseñando, usar en plural los sustantivos masculinos de persona para designar a todas las personas, sean varones o mujeres. Es lo que se llama empleo genérico del masculino plural.
“Los espectadores recibieron con aplausos a los actores”
Sin embargo, actualmente estas construcciones están variando: la política de igualdad social, el acceso de la mujer a los puestos de responsabilidad y la influencia de los medios políticos, administrativos y periodísticos llevan a pronunciar:
“Los espectadores y las espectadoras recibieron con aplausos a los actores y las actrices”.
No creo que uno no se sexista o lo sea por utilizar respectivamente las fórmulas “os/as” o simplemente la de “os”...
Soy consciente de que en algunos casos, el uso de vocativos desdoblados se puede interpretar como un detalle de cortesía: “señoras y señores”, sustituto del clásico “damas y caballeros”, pero, salvo algunas excepciones que exigen esa matización de los géneros para evitar errores, me resulta un tanto artificiosa y redundante esta fórmula, “a los trabajadores aragoneses y a las trabajadoras aragonesas...”, aunque sea políticamente correcta. No me considero seguidor inquebrantable de los cánones gramaticales, pero no me gusta, insisto, esta moda de las duplicidades. Mucho me temo que, a estas alturas de la película, uno tiene tan asumido lo del masculino plural genérico que, aun con riesgo de ser condenado a la hoguera, va a continuar diciendo “todos” en lugar de “todos y todas”... Respetar al otro sexo va más allá de utilizar meras formas gramaticales. Digo...
CON MENOS CLARIDAD Y ELOCUENCIA QUE TU HACE UN TIEMPO OPINE SOBRE LA TONTERIA DE LOS JOVENES Y LAS JOVENAS DE LA MINISTRA BIBIANA, SI TE APETECE LEE ESTO:
ResponderEliminarhttp://grouchomaniaco.blogspot.com/2008/06/ministra-ministro-bibiana-bibiano-que.html
A GROUCHO:
ResponderEliminarPero de forma divertida y muy clara, amigo Groucho. Me he divertido leyendo tu entrada
Sabias palabras. Estarás conmigo en que las lenguas evolucionan porque se hablan mal, de modo que el castellano actual es un modelo de evolución acelerada. Cualquiera explica a todos estos propagandistas lo que tú tan bien detallas. Por pura economía lingüística hemos eliminado el género neutro y adjudicado a uno de los dos sexos la condición genérica. ¿Por qué no al femenino? Porque es el término marcado. La diferencia es ser mujer. Ser hombre es no ser nada. Si se lo planteasen de ese modo, quizá dijeran menos tonterías.
ResponderEliminarSu fallo consiste en que la lengua puede hablarse muy mal y evolucionar mucho, siempre y cuando sea con criterios de economía. Doblar palabras para no discriminar es despilfarrar palabras innecesarias para comprender. Eso una lengua sólo lo admite como una moda, pero tarde o temprano lo acaba desechando. Salud.
Siempre me ha parecido digno de loa y admiración la capacidad que tiene el pensamiento feminista para descubrir la presencia de la genitalidad masculina en los lugares más recónditos y escondidos de nuestra realidad. Creo que con esos scaners mentales tan poderosos, no se necesitarían aparatos tan lujuriosos para descubrir nuestros secretos más íntimos en los aeropuertos.
ResponderEliminarLúcido como siempre, Luis Antonio. La causa en pro de la mujer tiene frentes más importantes que este que comentas, hace mucho tiempo resuelto por la norma, por el uso y por el sentido común, que rechaza connotaciones machistas cuando de definir la denominación de un grupo se trata. Nadie en su sano juicio piensa que cuando se habla de los "vascos" no se está incluyendo a las "vascas", pese a las alusiones de Ibarretxe que acabaron causando hilaridad. No es la palabra la que hiere, sino la acción que motiva el agravio y el trato desigual. Y es que no por invocar reiteradamente la dualidad del género se defiende mejor el derecho de las mujeres al reconocimiento de sus derechos.
ResponderEliminarNo creo que la lengua sea sexista, pero sí, y mucho, la utilización que se hace algunas veces de ella.
ResponderEliminarMe parece ridículo en grado sumo lo de utilizar el mismo término en femenino en nombres que con el masculino plural siempre han sido suficientes para designar al colectivo.
Desde "las miembras" (un error por parte de la ministra que se intentó disfrazar de "igualdad" y, lo peor: hubo quienes se lo creyeron y ahora van por ahí haciendo el ridículo hablando en masculino y femenino innecesariamente), creo que hemos centrado el problema de la desigualdad en minucias léxicas y se están dejando de lado otros aspectos sociales más importantes.
Un beso, Luis, y feliz semana
Vaya, con la ilu q me hacía ser una jóvena miembra, el público y la pública me van a privar de ser una honorabla persona (nunca persono) ;)
ResponderEliminarBesicos y besicas.
Bajo mi punto de vista el lenguaje sí es sexista, porque el lenguaje no es ni más ni menos que un reflejo de la sociedad, y que yo sepa hasta ahora la sociedad siempre le ha dado un papel relevante al sexo masculino.
ResponderEliminarEstamos acostumbrados a determinados usos del lenguaje y todo lo que se salga de esa costumbre nos resulta extraño y nos suena mal.
Si, a partir de mañana, tuvierámos que decir la reloj, o el pared (aunque las cosas no tengan en sí mismas género, seguro que nos sonaría mal y nos parecería ridículo)
Si la sociedad evoluciona hacia posiciones de mayor igualdad, más tarde o más temprano, el lenguaje también tendrá que evolucionar.
Un abrazo fuerte, Luís Antonio.
Quizas sea por que uno según va creciendo va teniendo menos claro lo de los roles, quizas es que lo de "vascos y vascas" siempre me ha sonado mal, quizas es que el idioma de cada uno me parece muy importante, pero la verdad es que ultimamente en todo eso no veo sino un afan por dejar claro algo que, para todos aquellos a los que les importa el tema, esta muy claro de por si.
ResponderEliminarO quizas es que me estoy volviendo muy vago.
Un saludo maestro.
PD. Por cierto no deja de ser curiosa la palabra que me ha salido para verificar "trona"
De seguir así habrá que utilizar el neutro para los bisexuales u homosexuales... cuestión de tiempo... y de complicar las cosas... un poquito más.
ResponderEliminarP.D. La palabra de verificación también complica.
A mi no me parece sexista en absoluto, solo economista.
ResponderEliminarNo sé qué decir, salvo que las cosas se pueden ver de muchas maneras diferentes...
ResponderEliminarHacer sonar la -a y la -o, en singular o en plural, puede ser una moda pasajera o establecerse con tiempo y muchos errores... eso sí, si se rodean de dobleces nunca crecerán sanas...
y siempre dependerán del proceso de adopción del conjunto y, cómo no, de cada un@ de nosotr@s...
...Justo aquí quería llegar, que me fascina @ cuando escribo con teclado.
¿Seré capaz de darle algún sonido que lo defina bien o lo inventará otro?
Esotes!!!... ;)))
A BERNARDINAS:
ResponderEliminarTu comentario es inteligente y de una gran sutileza. No sé si estará al alcance de los que dicen tales tonterías. Creo que esta moda tiene los días contados. Y habrá que agradecérselo al Sr. Ibarretxe que, queriendo ser políticamente correcto, la pifió hasta el tuétano.
Un abrazo
AL DR. KRAPP:
Genial, divertido y sarcástico comentario, amigo Dr. Lástima que no llegue a quien debería...
A FERNANDO MANERO:
Me congratulo de coincidir en este tema contigo y con la mayoría de los comentaristas. Si reconocer, como bien dices, la dualidad del género solventase el problema de la todavía desigualdad imperante, qué fácil sería remediar tamaña injusticia. Yo sería el primero en duplicar expresiones, a pesar de su fonética antiestética.
A NOVICIA DALILA:
Por fin, una mujer en este espacio. Me alegra un montón que coincidas en algo que debería ser obvio para todo el mundo, pero que no lo es. Como bien dices, nos enzarzamos en lo accesorio, dejando el fondo marginado.
Besos cariñosos para ti, Novicia
A SARA:
Me encanta tu sentido del humor. Ese es el camino.
Para ti también “besicos y besicas”. Y así todos “contentos y contentas”
A CRISTAL:
Yo creo que el lenguaje es un instrumento común para todos los usuarios del mismo código. Y serán los usuarios los que lo utilicen de forma sexista o no. Por supuesto que el lenguaje está en continua evolución, pero las modas acostumbran a ser pasajeras, sobre todo cuando atentan a la economía de palabras...
Otro fuerte abrazo, Cristal
A TUMULARIO:
Yo creo que con la edad se acostumbra a relativizar muchas cosas, a tener las ideas más claras y a no gastar energías en balde...
Lo de “trona” tiene muchísima gracia.
Un cordial saludo
A P. Vázquez “ORIENTADOR”:
A lo mejor el tiempo acaba poniendo las cosas en su sitio. Hay que darle un voto de confianza.
A CANDELA:
Me gusta que en tema tan complejo coincidamos.
A BORRAESO:
ResponderEliminarNo eres la única que utiliza @ para ese cometido. A lo mejor tiene éxito y la RALE acaba incorporándola como la sexta vocal. Como bien dices, qué sonido se le puede dar...
Veo que en este tema no te has mojado en demasía...¿Te da cierto apuro ir contra la corriente que han marcado los comentaristas que te han precedido? Lo dudo. Más bien creo que tienes tus dudas, como todo hijo de vecino...
Pero no olvides que la lengua está en continua evolución y que somos los hablantes de una y otra generación los que marcamos la pauta. El objetivo es no estropearla ni empobrecerla...
ESOTES:
Pero si vos lo dijiste clarito, clarísimo en el primer párrafo.
ResponderEliminarNo me parece mal, cuando la palabra tiene ambos géneros que se utilicen, no creo que sea eso redundante. Lo que sí es erróneo es adjudicarle un género que no posee, como por ejemplo hace la Sra. K al llamarse Presidenta.
Ahora te doy mi opinión sobre esa cabecita sobre la cual pusiste tu gorra...es totalmente inexpresiva y asexuada...igual responde si le pones una capelina de plumas que una boina...pero si a vos te gusta, qué le vamos a hacer.
Besitos muy contentos de verte, aunque sea con carita plástica...
Pra mí, la Sra. K. es Presidenta y el Sr. N.(su esposo) fue Presidente. Pero éste no es el caso... El tema es el uso del masculino plural o no para referirse a ambos géneros...
ResponderEliminarRespecto a la cabecita inexpresiva tocada con la gorra...estoy abierto a sugerencias. La cuetión no está cerrada.
Me parece un absurdo el tener que desdoblar una palabra para no parecer sexistas, machistas o como lo querais llamar. Si se emplea el masculino genérico es por que ha sido la norma desde que la lengua se formalizó. Que esté bien o mal, sinceramente me da igual. Yo se que cuando dicen "todos" se refieren tambien a mi, aunque sea mujer. Y no me siento ni discriminada ni inferior.
ResponderEliminarLas palabras reflejan la realidad como decía alguien por ahí. Pero que me diga si refleja la realidad cuando alguien dice "todos y todas" y luego va y le dice a su novia que esa falda no se la ponga. Muy coherente con lo que dice no es. Por eso creo que por mucho que se intente cambiar la lengua, si las actitudes no cambian poca igualdad habrá. Menos dedicarse a tonterias como estas y pensar mas en cosas como la conciliacion de tareas domesticas e igualdad de empleo.