Tuve oportunidad de conocer una muestra de los guerreros de terracota en el Fórum de las Culturas celebrado en Barcelona el año 2004. Este verano he tenido la fortuna de visitar Xi’An y de hacerme cargo de la grandeza de este hallazgo prodigioso.
El descubrimiento de los guerreros de terracota y caballos del emperador Qin Shihuang fue por casualidad. Este honor pertenece a unos campesinos, (uno de ellos me firmó el libro que adquirí en el bazar de recuerdos) que en 1974 excavaban un pozo en la aldea de Xiyang (Xi’An) Cuando alcanzaron una profundidad de cuatro metros, descubrieron unos trozos de terracota, que en realidad era una figura con armadura, arco y flecha de bronce. Este descubrimiento fue relacionado por las autoridades con el mausoleo del emperador que está cerca de la aldea en una colina, comprendiendo que se hallaban ante objetos de gran valor histórico.
Tanto los chinos como el mismo Mao se quedaron boquiabiertos y entusiasmados por tal evento. El momento era políticamente correcto, y el descubrimiento se convirtió en primera noticia mundial y en un reclamo turístico para el que no se escatimaron recursos. Se han cubierto tres fosas de miles de m2 y se ha levantado un museo donde destaca la exposición de cuádrigas de bronce pintado y arreos de caballos descubiertos en 1980. Los hallazgos se suceden año tras año y queda pendiente la joya de la corona: el mausoleo del emperador. El Gobierno no quiere correr ningún riesgo y se niega a conceder todavía los permisos para investigar la pirámide y el palacio de Qin. Pekín considera que no existe tecnología suficientemente avanzada como para asegurar que el interior no se vea afectado con la apertura, y prefiere esperar al momento adecuado. Para el Estado chino actual es el punto de partida de la China imperial, de la que la República Popular se considera legítima sucesora.
El descubrimiento de los guerreros de terracota y caballos del emperador Qin Shihuang fue por casualidad. Este honor pertenece a unos campesinos, (uno de ellos me firmó el libro que adquirí en el bazar de recuerdos) que en 1974 excavaban un pozo en la aldea de Xiyang (Xi’An) Cuando alcanzaron una profundidad de cuatro metros, descubrieron unos trozos de terracota, que en realidad era una figura con armadura, arco y flecha de bronce. Este descubrimiento fue relacionado por las autoridades con el mausoleo del emperador que está cerca de la aldea en una colina, comprendiendo que se hallaban ante objetos de gran valor histórico.
Tanto los chinos como el mismo Mao se quedaron boquiabiertos y entusiasmados por tal evento. El momento era políticamente correcto, y el descubrimiento se convirtió en primera noticia mundial y en un reclamo turístico para el que no se escatimaron recursos. Se han cubierto tres fosas de miles de m2 y se ha levantado un museo donde destaca la exposición de cuádrigas de bronce pintado y arreos de caballos descubiertos en 1980. Los hallazgos se suceden año tras año y queda pendiente la joya de la corona: el mausoleo del emperador. El Gobierno no quiere correr ningún riesgo y se niega a conceder todavía los permisos para investigar la pirámide y el palacio de Qin. Pekín considera que no existe tecnología suficientemente avanzada como para asegurar que el interior no se vea afectado con la apertura, y prefiere esperar al momento adecuado. Para el Estado chino actual es el punto de partida de la China imperial, de la que la República Popular se considera legítima sucesora.
Las fosas se abrieron al público en 1979 y desde entonces son visitadas por personalidades y millones de turistas de todo el mundo. Los arqueólogos han dejado al descubierto más de 6.000 figuras, todas ellas diferentes, de un total estimado en unas 8.000. Pero el ejército de terracota es solo la punta del iceberg de uno de los mayores descubrimientos de la era moderna, y continúa el debate sobre lo que todavía se oculta bajo tierra.
Quin Shihuang fundó el Imperio Chino y murió temeroso del otro mundo.
Por eso se hizo enterrar junto a un enorme ejército de barro. Otros piensan que dicho emperador, no contento con el poder que detentó en la tierra, quería hacerlo extensivo también al más allá...Los hallazgos de nuevas figuras se suceden continuamente, pero el misterio sobre su origen continúa.
El guía que nos acompaña, licenciado en Filología Hispánica, se interroga en voz alta sobre los enigmas pendientes. ¿Cómo se consiguió realizar una obra de esta magnitud?; ¿por qué se perdió la memoria de todo ello a poco de un siglo de haberse construido?; ¿por qué se descubrió en plena Revolución Cultural?; ¿por qué el Estado chino no hace excavar el túmulo que encierra la tumba del primer emperador?; ¿por qué este emperador aspiraba a gobernar también sobre el más allá?... Los enigmas que vienen acompañando a este descubrimiento se deben a que no existe ningún precedente conocido en la historia de China ni en otro lugar del mundo.
El guía que nos acompaña, licenciado en Filología Hispánica, se interroga en voz alta sobre los enigmas pendientes. ¿Cómo se consiguió realizar una obra de esta magnitud?; ¿por qué se perdió la memoria de todo ello a poco de un siglo de haberse construido?; ¿por qué se descubrió en plena Revolución Cultural?; ¿por qué el Estado chino no hace excavar el túmulo que encierra la tumba del primer emperador?; ¿por qué este emperador aspiraba a gobernar también sobre el más allá?... Los enigmas que vienen acompañando a este descubrimiento se deben a que no existe ningún precedente conocido en la historia de China ni en otro lugar del mundo.
Los chinos, que no creen en el Dios justiciero y creador que la herencia judía nos legó en Occidente, han vivido siempre en un mundo poblado por los espíritus malignos de aquellos que han tenido una mala muerte y yacen sin enterrar o sin las honras fúnebres apropiadas. Dado el número de ejércitos a los que había masacrado dicho emperador – las crónicas afirman que en una ocasión exterminó 450.000 soldados del reino de Zhao – y el número de reclutas propios a los que había hecho morir en combate, Qin Shihuang necesitaba un ejército para poderse mover con comodidad en el airado mundo de los muertos, que llegarían sin duda por el Este, procedentes de la gran llanura central donde se habían asentado los reinos recién conquistados. Es por ello que el ejército de terracota estaba situado en el flanco oriental del gran complejo funerario, y que su formación estaba orientada hacia el Este.
La tumba del ejército de Qin Shihuang revela una
práctica establecida de fabricación en cadena y control de calidad: una
estricta organización del trabajo que sí tenía precedentes. Una vez amasada la
arcilla, la estructura básica de todas las esculturas era la misma: los pies y
las piernas se elaboraban de forma maciza para proporcionar estabilidad al cuerpo
central, que se encajaba en la parte superior de las piernas. Las manos, brazos
y cabezas se producían separadamente y se añadían en el último momento: se han
identificado ocho tipos básicos de caras, sobre las que luego se aplicaba una
placa fina de arcilla que permitía individualizarlas. Una vez ensamblados y
retocados los módulos básicos, las piezas se cocían enteras.
Sobre las diversas teorías y especulaciones que se hacen sobre este enigmáticos episodio, nuestro guía se inclina por la siguiente:
Poco después de la muerte del emperador, todo el conjunto – que probablemente quedó inacabado por su muerte repentina y los disturbios que acabaron con su imperio en pocos años – fue sometido a una destrucción masiva y deliberada. China se hundió en una guerra civil, y uno de los contrincantes, Xiang Yu, perteneciente a la antigua nobleza que el primer emperador había destruido, se ensañó a conciencia con todo el recinto: no solo se trataba de un saqueo, sino de destruir el universo de los vencidos y eliminar así su poder sobre los vivos. Provistas de antorchas, las huestes de Xiang Yu entraron sin duda en la fosa uno, donde se alineaban, a cinco metros bajo tierra, unos 6.000 guerreros, organizados en una vanguardia frontal en triple fila tras la cual se levantaban 38 hileras de soldados de a pie y 160 carros de combate. Los intrusos merodearon por los corredores de suelo pavimentado, paredes recubiertas de madera y techos sostenidos por vigas: el conjunto se incendió y los techos se derrumbaron sobre las estatuas. Pero ello no basta para explicar su omisión en todas las historias siguientes.
El del centro, aunque se parece a mí, es una burda copia. Doy fe de ello.
De esta visita me han quedado dos recuerdos nítidos: la sensación de presenciar un yacimiento arqueológico que está vivo, y que posiblemente no revele todos sus secretos jamás y encontrarme en el bazar con una pareja recién casada que estaba de viaje de bodas...La novia, y aquí está la noticia, resulta que es de mi pueblo natal...
Este es uno de los lugares que más me apetecen visitar de la Tierra, lo reconozco.
ResponderEliminarJolín! vaya sincronía lo de la novia de tu pueblo. Lo de las bodas, tiene su 'qué' en tu caso, ya ves!
ResponderEliminarPor lo demás, no sabes la envidia cochina que me corroe en este momento, al ver tus fotos. pero me alegro muchísimo de que disfrutases de todas esas maravillas. Afortunado, tú!
En fin! un abrazote, grande.
Impresionante verdad?, es una maravilla ver la cantidad que hay y en buen estado, todo es a lo grande, me alegro que pudieras disfrutar de esta visita.
ResponderEliminarUn reportaje muy bueno has hecho, un abrazo.
Luis Antonio, esto si que es una lección magistral, me he quedado impresionada al leerlo, te has documentado muy bien y he disfrutado mucho al recordar. También yo tengo el libro, con la firma de uno de los descubridores, que por cierto se negó a que lo fotografiáramos.
ResponderEliminarContinúa mi gran interés.....para tu próxima entrada, sobre el viaje.
Un abrazo. Etel.
Muchas gracias Luis Antonio por esta reseña :me encantan estos soldados de terracota de hecho en una de mís entradas salen dos: por supuesto en miniatura me parecen tan bonitos y ninguno es igual.Un mérito que se lo tendrian que llevar estos artesanos sobre todo para cocer estas piezas es que son de un tamaño considerable.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un abrazo.
jajaja empiezo por el final LUIS ANTONIO pero qué guapa ha quedado tu carita sonriente sobre ese cuerpo de guerrero chino ¿sabes a quien te pareces ahí? a Lenin pero son sonrisa, que dudo que usara por cierto y a ti te queda de maravilla:))
ResponderEliminarRespecto a los guerreros de Xi’An, qué decirte... a veces me parece increíble las ingentes obras que ha llegado a hacer el hombre sin contar con más medios y tecnología que sus manos y sus cabezas... es absolutamente increíble que exista un ejército de tal magnitud hecho en piedra y sí, aun más increíble que durante tantísimo tiempo nadie haya sabido de él hasta ser descubierto con las excavaciones... ¿cómo se puede olvidar una joya así en el tiempo? fíjate que la Atlántida en realidad nadie la ha visto y desde los más remotos tiempos se busca suponiendo que haya existido alguna vez...hay secretos que parece imposible explicar y mucho más guardar siendo del tamaño que es este.
Ya te lo he dicho, pero ¡¡qué afortunado eres habiendo tenido el privilegio de verles las caras de cerca a estos guerreros y sobre todo al mundo que los rodeó!! me alegro muchísimo por ti.
Muuchas gracias por traérnoslos de visita, muuuchos besos para ti y muy feliz finde L.A:))
jajaja perdón guapO... xD!! ya sabes las carreras mías que me hacen decir estas blasfemias:))
ResponderEliminarExcelente la información histórica que nos has proporcionado sobre los terracotas chinos. La desconocía por completo a pesar de que también vi la muestra de Barcelona. Es una pena que no continúen con las investigaciones y excavaciones, pues siempre es interesante conocer el pasado de todas las culturas. Al menos a mí, me apasiona.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Alucinante,profe, alucinante.
ResponderEliminarEsto me recuerda las obras faraónicas de impresionante magnitud, belleza y sacrificio, ya que también los faraones se enterraban con su séquito, sirvientes y demás, pensando en ellos por supuesto y su seguir ostentando el poder en el más allá, tras el paseo en la barca, pero sin que les faltase nada...
Lo de este ejército descomunal, sorprendente y misterioso, mucho me temo que seguirá siendo así...la mentalidad china es muy introvertida, muy de tradiciones y misterios ancestrales, con lo cual, si nada se supo e incluso se puede decir que se anuló esta obra, es porque se pretendía que no hubiese indagaciones,digo yo, que vete tú a saber.
De cualquier modo, que sepas que me das una envidia terrible por haber estado ahí presenciándolo, además de ser, por unos instantes, uno de ellos,ja,ja,ja
Algo distinto, eso sí.
:)
Otra cosa...¿qué es eso de que te desorbitan las de Iguzú, motivo por el que te ausentas?
Es que no sé si te has dado cuenta, pero soy un poco lenta de reflejos, corta que se dice y me cuesta entender a veces,ja,ja,ja
En fin, sea lo que sea, que sea para bien y vuelvas pronto.
Besos.
Ni una china en las terracotas.
ResponderEliminarEn China, igual que en muchos países, más mujeres que hombres ingresan a la universidad. Pero ¿cuántos trabajos realmente pueden ellas desempeñar en la vida real?
Espero no molestar con esto a los guerreros de Xi´han ( no sabía donde dejarlo:-((...
ResponderEliminarAcabo de verte y Jo! me ha dado pena la niebla ...¡¡Ojalá se disipe prontito!! y vuelvas a guerrear en letras con nosotros aquí. Me he acordado de esto y... bueno, te lo dejo para que te acompañe mientras todo se despeja...
Down by the river by the boats
Where everybody goes to be alone
Where you wont see any rising sun
Down to the river we will run
Nos vemos en la orilla del río, cuando vuelvas ¿vale?...
Un beso muuuuy grande y...hasta cuando quieras.
Cuídate mucho Luis Antonio y ... graaaciaaass siempre.
El miedo es capaz de estimular la creatividad humana de una forma increíble. Creo que fue el mismo Quin Shihuang el que empezó la construcción de la Gran Muralla, el que unificó el país y la lengua. Para salvar los logros de una civilización floreciente intentó distanciarse de un entorno hostil y crear su flor de loto dentro de su propio invernadero. Lo logró y supongo que esos estratégicos soldados eran capaces de conseguir tanto como los soldados reales frente a los enemigos. El miedo otra vez.
ResponderEliminarUn abrazo y suerte con lo tuyo.
Espléndido reportaje el tuyo. Ya sabía cosas de estos guerreros, pero tú lo cuentas con una familiaridad tal que me parece que estos guerreros están ahí. Y que existen. Y todas las preguntas que propones en el post no hacen otra cosa que avivar el interés, el misterio...
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya me gustaría a mí visitarlo.
ResponderEliminarInteresante entrada.
Un beso.
El canal de la televisión pública china CCTV triunfa con el talent show "El Gran Concurso Español". Un programa al puro estilo de Operación Triunfo pero con una peculiaridad: solo se puede cantar en castellano. Desde el lejano oriente llega este formato que ha revolucionado el país. Nuestro idioma está de moda en China y así lo demuestran todos los candidatos que se han presentado al concurso. Unos 170 aspirantes que debían mostrar su destreza con el castellano, cantando, realizando debates y recitando poemas
ResponderEliminarUn programa que buscaba a la persona más hábil con el idioma de Cervantes y que ofrecía como premio un viaje a Perú. Después de varias semanas de competición, ya se conoce a la ganadora: Deng Yuqing o Gabriela, nombre artístico de la joven
Fantástica la historia y cómo la has contado.Recuerdo haber leído algo en la prensa pero me quedaba lejos ¡Qué decir de las fotos! Qué decir de la última! La del guerrero con gorra del centro!!. Je, je.
ResponderEliminarEse empeño por aniquilar al otro hasta hacerlo desaparecer... ¡Cómo es el ser humano! ¡Qué creativo y destructivo.
Me viene a la memoria una historia con dos mujeres chinas. Estaba en uno de mis cursos y había un grupo de profesores chinos, así que nos prepararon un encuentro para que intercambiáramos impresiones sobre la enseñanza en nuestros respectivos países. Mi amiga Mariola tuvo mucha suerte, le tocaron dos profes muy majos ellos que la invitaron a una coca-cola y quedó encantada. Por mi parte yo no veía el momento de que aquello terminara. El encuentro fue en un pub que había dentro del recinto de la universidad y me sentaron entre las dos. Yo creía que después tendríamos que exponer en clase el resultado de nuestra entrevista así que empecé a hacerles preguntas sobre su sistema educativo y sus condiciones laborales. Resultó que una debía de ser una profe normal, como yo, de base, y la otra debía de tener un cargo y cada afirmación de una la otra lo negaba. Yo intentaba entenderlas, porque a los chinos siempre los he entendido mal, pero era cristalino que si no hubiera estado en medio de las dos se hubieran tirado de los pelos. La una diciendo lo insufrible que era ser profesora en China y la otra negándolo tajantemente. Ni un trago de agua pude dar.
Me alegra que disfrutaras de tu viaje. ¿Y ahora dónde estás, guerrero?
Muchos besos.
Espero que todo vaya muy bien, Luis Antonio, y que vengas pronto por aquí a echar un ojo.
ResponderEliminarMuchos besos y abrazos.
Sin duda el mundo es un pañuelo lleno de mocos, mira que encontrarte a una paisana en la otra punta del mundo.
ResponderEliminarMuy interesante e instructiva tu entrada.
Besos