Es una de las fotografías de Elliott Erwitt (1953) que ha logrado conmoverme más. La contemplé hace tiempo y hoy he vuelto a reencontrarme con ella. No he podido evitar la tentación de compartirla con vosotros. Me impacta, sobre todo, la simplicidad natural de la mirada de la madre y esa sonrisa apenas esbozada, pero que lo dice todo... Es una imagen que materializa, como pocas, la ternura maternal...
Pues sí, Luis Antonio. Dicen que una imagen vale más que mil palabras. La fotografía tiene la cualidad de captar un instante e inmortalizarlo para siempre. Cada cual verá algo diferente y ese instante que recoge una foto te hace pensar en el antes y el después de ella e intentar meterte en su piel y en su sentir. La foto es tan austera que llama la atención tanto la mirada reposada de la madre como la placided del bebé durmiendo, los dos en conexión. Una instantánea que desprende ternura por todas partes. Del gato no comento nada.
ResponderEliminarUn beso, querido Luis.
Tienes razón, la foto habla por sí sola. Y con sólo mirarla a cualquiera le sale una pequeña sonrisa.
ResponderEliminarBesos.
Anda la ternura anidando esa imagen, se queda allí y trasciende este blog para volar hasta mí.
ResponderEliminarUn abrazo.
Alicia
A mí me ha emocionado. No la conocía. Ha sabido captar perfectamente ese vínculo invisible entre una madre y su hijo. Esa complicidad, esa devoción y esa entrega absolutas.
ResponderEliminarEs conmovedora de verdad.
Muchas gracias, Luis.
Quise decir placidez.
ResponderEliminarEs preciosa.
ResponderEliminarEs preciosa la foto. Saber, o poder, captar la mirada es un acierto, porque una mirada puede decir mucho más que nada. Es una foto que habla por sí sola.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy buena. Tan expresiva...
ResponderEliminarA Angie, Vanessa, Alicia Maria Abatlli, Novicia Dalila, Sara Royo, Miguel y Tesa:
ResponderEliminarDada la unanimidad en la valoración de la fotografía, poco me resta por decir, salvo daros las gracias y mostrar mi satisfacción porque también haya sido de vuestro agrado.
Un fuerte abrazo